Tras más de 20 años de investigaciones y análisis, lo que el autor aporta al cervantismo en su libro son tesis basadas en documentos de diversos archivos, apuntando, entre otras cosas, la existencia de dos Miguel de Cervantes que se conocieron en algún momento de sus vidas y que vivieron las mismas vicisitudes.
Uno de esos documentos, “redescubierto” y valorado en su medida por el investigador, es el que custodia el Archivo General de Simancas (Valladolid), donde existe una carta de don Juan de Austria a Felipe II, de 19 de marzo de 1572, en la que se hace relación de 409 personas que se encontraban en Mesina procedentes de la Batalla de Lepanto y en la que se mencionan, entre otros nombres, a dos Miguel (de) Cervantes.
En dicha relación se especifican las ayudas de costa que se dieron a estos soldados entre el 13 de noviembre de 1571 y el 15 de marzo de 1572, y que está firmada el 16 de marzo de este último año en Palermo. “Lo que viene a certificar que hay dos Cervantes que, según el investigador fadriqueño apunta en El regocijo de las musas, serían, por un lado, el autor del Quijote, nacido en Alcázar de San Juan y, por otro, el famoso manco de Lepanto, nacido en Alcalá de Henares, los cuales se debieron conocer en esas circunstancias o ya se conocían con anterioridad, y por eso aparecen juntos en ‘la lista’ de Simancas”. Ante todos esos datos, Mendoza cree, en la hipótesis que plantea, que el individuo nacido en Alcázar sería hijo adoptivo de la familia de Alcalá.
“Esta lista, asegura Antonio Mendoza, no fue recogida, curiosamente, por Astrana Marín, a pesar de dar numerosos datos, en la misma dirección, que se encuentran en este Archivo. Lo cual hace suponer que estamos ante dos individuos distintos, dos Miguel (de) Cervantes, que a la tesis oficial debe dar algún que otro quebradero de cabeza”.
“A este dato hay que añadir un artículo de Héctor Vielva sobre un estudio del investigador turco Rasih Nuriller, en el que este último afirma, con documentación, que entre 1578 y 1580, hubo un Miguel de Saavedra Cervantes, como esclavo, y por lo tanto cautivo, trabajando en la construcción de una mezquita en Estambul. Por cierto, esta hipótesis de la estancia de Cervantes en Estambul, según Rasih Nuriller, no ha sido apoyada “por ninguna publicación académica”, según apunta Héctor Vielva.”
“Si vamos a comparar las fechas, añade, vemos que un Cervantes estuvo cautivo en Argel entre 1575 y 1580, y el otro, en Estambul, entre 1578 y 1580. De nuevo tenemos que hablar de dos individuos distintos, aunque homónimos. Además, en su novela de El amante liberal, o en la comedia de La Gran Sultana, el escritor demuestra su amplio conocimiento de la sociedad turca, lo mismo que en sus obras El trato de Argel y Los baños de Argel respecto de la sociedad argelina.”
De estos y otros asuntos, sobre la obra y el mundo cervantinos, hablará Antonio Mendoza el próximo viernes 24 de febrero en la Casa de Castilla-La Mancha en Madrid, en la presentación de su libro El regocijo de las musas. Del lugar de la Mancha al origen del Quijote y a la cuna de Cervantes y que será a partir de las siete de la tarde.