


Se trata de una procesión que se ha convertido en tradicional y que se desarrolla durante la mañana del Viernes de Dolores por las calles cercanas al Centro Educativo.
En la estación de penitencia participa toda la Comunidad educativa del Colegio, alumnos desde infantil a Educación Secundaria Obligatoria, profesores, así como madres y padres, poniendo todos su granito de arena e ilusión para que la procesión resulte un éxito.
Caras de alegría, emoción y sentimiento se han podido observar desde que la puerta del colegio se ha abierto para dar comienzo a la procesión después de dos años sin poder realizarse. La calle Emilio Castelar se ha convertido en el punto más destacado del desarrollo, donde los dos pasos que los niños portaban en andas, con las imágenes de Nuestro Padre de la Caridad y Nuestra Señora de la Ternura han sido balanceados al son de las saetas que un vecino ha dedicado a los mismos. Esta calle ha sido el tramo más concurrido para ver el desfile procesional en el que los alumnos de Infantil, primero y segundo curso de Primaria han sido los penitentes; de tercero a sexto de primaria costaleros y de tercero de primaria a segundo ESO los músicos, encargados de poner el acompañamiento musical con sus flautas y tambores. El resto de alumnos se ha encargado de la organización.
Cabe recordar que las imágenes portadas por los alumnos son Nuestro Padre de la Caridad y Nuestra Señora de la Ternura, en honor y representación de los valores que caracterizan la obra de Santa Emilia de Rodat, fundadora de la Sagrada Familia.