La Fundación Horizonte XXII de Globalcaja ha clausurado su programa de Mentoring para los integrantes de la Plataforma de Creación de Empresas Desafío 22, cumpliendo así su objetivo de poner a disposición de los emprendedores la experiencia, conocimientos y contactos de profesionales con un gran bagaje profesional para ayudarles a poner en marcha sus iniciativas empresariales. En el acto estuvieron presentes la directora general de Horizonte XXII, Ana López Casero; Rafael Puyol, vicepresidente de la Fundación IE y vicepresidente de Relaciones Internacionales del Instituto de Empresa; y el coordinador de SECOT, José María Llorente, además de mentores, mentees y representantes de diferentes colectivos relacionados con el emprendimiento.
Como explicó la directora general, la Fundación cierra así la primera actividad del programa de voluntariado empresarial que se pone en marcha en la región para apoyar desinteresadamente a quienes inician su andadura en el mundo de la empresa. López Casero quiso mostrar su agradecimiento a los voluntarios de la Asociación de Seniors Españoles para la Cooperación Técnica (SECOT), así como al Instituto de Empresa, que ha impartido formación y asesoramiento específico de calidad a los mentores, y a EOI. Asimismo, detalló, y dados los excelentes resultados obtenidos, la Fundación quiere ampliar esta labor más allá del propio Desafío 22, ofreciendo el acompañamiento de mentores a los emprendedores de Castilla-La Mancha que lo soliciten. Finalmente, Ana López Casero aseguró que este programa se ofertará también a los integrantes de la plataforma en su segunda convocatoria, actualmente en fase de selección de ideas, porque “las cosas buenas hay que potenciarlas”.
Importancia de la emprendeduría
Por su parte, Rafael Puyol explicó que para el Instituto de Empresa, al que califica como innovador e internacional, la emprendeduría tiene un papel muy relevante. Según aseguró, se han logrado unas sinergias importantes entre SECOT, Horizonte XXII e IE que han dado “excelentes frutos” porque “el emprendedurismo va muy de la mano del mentoring”. Puyol agradeció a la Fundación el haberles implicado en “una preciosa y apasionante aventura” a la vez que reconoció el buen trabajo de los voluntarios de SECOT.
Cerró el turno de intervenciones José María Llorente reconociendo el sacrificio de mentores y mentees, los primeros al desarrollar su labor de forma altruista y poniendo su experiencia y el corazón en el acompañamiento de los mentees, y los segundos por un esfuerzo que les sirve tanto para su desarrollo personal como profesional. Llorente recordó que la labor de los mentores como orientadores de los proyectos de los emprendedores es importante, pero su labor principal es tratar de que afloren las capacidades de los mentees, a quienes auguró grandes éxitos.
Tras ellos, el Instituto de Empresa presentó los resultados de la evaluación del programa, entre los que sobresale la valoración especial de los mentees de la primera edición del Desafío 22 al hecho de que su mentor les ha aportado contraste sobre sus proyectos, además de relaciones sociales, contactos profesionales y mejora de la autoconfianza. Por su parte, los mentores inciden en el enriquecimiento que les suponen las nuevas ideas y perspectivas de los emprendedores, así como la ilusión por ser parte de un nuevo proyecto empresarial.
Por último, dos de los mentees y un mentor han contado su experiencia durante los últimos meses a los asistentes al acto, coincidiendo al considerarla muy positiva tanto por los resultados como por el vínculo que se establece entre ambos.
En total han sido 13 los mentees o emprendedores del Desafío 22 participantes, quienes han recibido asesoramiento de 15 mentores.
Aportando valor a Castilla-La Mancha
Con esta actividad, la Fundación pretendía aportar valor a Castilla-La Mancha mediante el intercambio de experiencias y conocimientos entre profesionales relevantes con personas que comienzan su andadura empresarial. Gracias a este programa, que continúa abierto para cualquiera que quiera montar su propia empresa, se ofrece a la persona emprendedora, o mentee, de la región una comunidad de mentores que da un servicio de acompañamiento empresarial, guiándole en la consecución de sus objetivos profesionales mediante un Plan de Acción. El mentor se centra en el emprendedor, o mentee, y no en su proyecto particular ya que no se dedica a hacer consultoría.
Los mentores pueden ser directivos en activo, seniors de SECOT, o quienes ya sean mentores en programas de diferentes instituciones académicas con los que colabora Horizonte XXII. En cuanto a los mentees, se puede otorgar este carácter a personas emprendedoras de Castilla-La Mancha, integrantes de la plataforma de creación de empresas innovadoras Desafío22, instituciones y asociaciones que estén interesadas en aportar este servicio de voluntariado a emprendedores.