Paco Torres declaraba que “hemos llevado a escena una obra que nadie había representado dándole nuestro toque con diversas piezas musicales” a lo que añadía que “los jóvenes han dado lo mejor de sí y han conseguido emocionar al público con sus interpretaciones”.
La historia estaba ambientada en un belén donde faltaba la figura del Niño Jesús. Las diferentes figuras que componen el conjunto le preguntaban al ángel por su falta, manifestando su deseo de que naciera, y el ángel a todos les respondía que no iba a nacer debido a las maldades presentes en el mundo. Finalmente, la obra termina con el nacimiento del Niño Dios tras los alegatos expuestos por diferentes alegorías que representan valores tales como la justicia, la paz, la libertad o el amor.
