Villarta de San Juan (Ciudad Real) ha empezado esta mañana con fuerza su tradicional Fiesta de Las Paces, en honor a su patrona, la Virgen de la Paz, con la inauguración de unas celebraciones declaradas de Interés Turístico Regional, en la que han participado el delegado de la Junta, Antonio Lucas-Torres, junto a diputada nacional Rosa Romero, quienes han acompañado a la alcaldesa Felicia Bascuñana en esta fecha tan señalada para la localidad.
Las fiestas se abrían, como es habitual, esta mañana, con la ofrenda floral a la Virgen de la Paz de las diversas peñas de la localidad, Reinas y Damas, autoridades, la Banda de Música y el grupo de Coros y Danzas “Alborea” en la iglesia Parroquial, más conocida como iglesia nueva por los villarteros. Las flores y los vecinos comparten espacio, a la puerta de la Iglesia, con una enorme montaña de leña, en forma de gavillas, que se acumula para ser quemada en la gran Hoguera esta noche de lunes, vísperas de Nuestra Señora de la Paz.
En la ofrenda han destacado los “Vivas a la Virgen” y la presencia, especialmente, de los niños y niñas de corta edad, vestidos ya como miembros de peñas. Tras la ofrenda, la comitiva se desplazó al Cine Negrillo, con todos y cada uno de sus huecos repletos de gente, donde se había instalado un montaje audiovisual para que se pudiera seguir mejor la ceremonia de apertura.
“Los cobeteros son lanzadores de sueños”
El acto, presentado por Raquel Aranda y Tomás Tabasco, comenzó con la imposición de coronas y bandas de las reinas y damas salientes a las nuevas, de modo que adquirieron su nueva condición de representantes del pueblo de Villarta Marta García e Irene Rodríguez, como damas de honor infantiles y Belén de Jesús Rodríguez como Reina infantil. Asimismo, Ana Jiménez Tajuelo fue nombrada reina de San Juan y Milagros Tabasco, Reina de Las Paces 2012, quien manifestó en unas breves palabras que era “un auténtico orgullo representar a mi pueblo”, además de desear “unas Paces inolvidables a todos”.
A continuación, un emocionado pregonero, el publicista Manuel Francisco García-Carpintero Martín, madrileño de madre villartera, licenciado universitario en Publicidad y Relaciones públicas que trabaja en ABC (grupo Vocento), manifestó emocionado que “todo villartero sabe que cada profundo deseo se lanza al cielo, empujado por la pólvora incandescente” y que, para él, “los cobeteros son lanzadores de sueños”.
Asimismo, recordó la importancia de momentos muy especiales que solo vive en la localidad, como el guiso de pelotillas tradicional, hecho con la receta de su abuela Joaquina, ya fallecida, y la intensidad con la que se disfrutan todos los momentos festivos en estas fechas. Por último, recomendó a quienes le escuchaban que “no permitan que la rutina les nuble la vista y les impida disfrutar de los momentos que merece la pena vivir”.
Antes de que comenzase la intervención de la concejala de Festejos, Adela Menasalvas, se entregó el premio del Concurso de Carteles de Las Paces, que recayó en Mª Jesús Rodríguez Labiano.
Felicia Bascuñana: “No debe haber crisis de alegría, ni de compromiso”
Menasalvas agradeció su colaboración “a todos aquellos que han hecho posible la celebración de estas fiestas tan importantes para todos nosotros”. A continuación, Felicia Bascuñana, que se estrenaba en sus primeras Paces como alcaldesa, reconoció que “en estos momentos vivimos una crisis económica, es cierto, pero no debemos tener una crisis de alegría ni de compromiso o de buen hacer”. Bascuñana, que tuvo un recuerdo especial para quienes, por distintos motivos no han podido participar en estas fiestas, dio las gracias también “a todos las que la hacen posible”: las peñas, la banda municipal, Asociación de Coros y Danzas Alborea y especialmente a quienes cortan la leña y los leñeros que la colocan en la gran pira que arderá esta próxima noche, entre otros.
Por su parte, Rosa Romero, diputada nacional y alcaldesa de Ciudad Real, trasladó a los vecinos el cariño que sienten en la capital por esta localidad, “pues muchísima gente de Villarta vive y trabaja con nosotros”. Asimismo, reconoció la capacidad de los vecinos para “abrir sus puertas a la alegría” y agradeció, por último, la posibilidad de sentirse una villartera más para compartir unas fiestas que tienen una tradición que se remonta al siglo XIV.
Finalmente, el delegado de la Junta, Antonio Lucas Torres, valoró el peso religioso y cultural de estas fiestas y su valor ya reconocido en la región, como Fiesta de Interés Turístico Regional, además de animar a los vecinos a aprovechar “un gran momento para cargarse de energía”.
José Asenjo, el coordinador de la Operación 2000, la tradición que mañana, elevará al cielo 2.000 docenas de cohetes, acercó a las reinas la urna en la que se encontraban las papeletas para elegir quien será el que pulse el botón que dé comienzo al espectáculo pirotécnico, un honor que ha recaído en José Félix Oviedo. Al finalizar el acto, se ha degustado una limoná y queso manchego, tras la actuación del grupo “Alborea” que ha ofrecido varias jotas a los presentes.
Este martes 24, día grande, Procesión y pirotecnia
Este martes 24 es el día grande de LAS PACES, que arranca a las 11,30 horas con la solemne función religiosa. Tras la santa misa, está previsto que salga la Procesión de la Santísima Virgen de la Paz, organizada por la Hermandad Nuestra Señora de la Paz. Como novedad este año, a la salida de la Virgen, la Asociación Villarta x la Infancia lanzará globos blancos y dos palomas blancas en señal de paz. La veintena de peñas locales alcanza aquí especial protagonismo abriendo la procesión.
En el ecuador del recorrido de la procesión, como viene haciéndose desde hace 40 años, tiene lugar también la llamada “Operación 2.000”, que consiste en tirar 2.000 docenas de cohetes en un par de minutos, justo cuando la Virgen sale de la iglesia vieja, en su bonito mirador sobre el río Gigüela.
Los villarteros ofrecen a su patrona, durante el recorrido de la procesión entre la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista “Iglesia Nueva”, hasta la Iglesia “Vieja”, el lanzamiento de numerosos cohetes para agradecerle algún hecho positivo ocurrido ese año en su familia, con lo que el recorrido se realiza en medio de una gran algarabía de pólvora.
Cuando acaba la Procesión, comienza la Puja de los Brazos de la Virgen, en la que los villarteros demuestran su devoción hacia su patrona, y su interés por portar a la Virgen en su entrada a la Iglesia.
Celebrando Las Paces desde 1575, fiesta de Interés Turístico Regional hace 16 años
El cronista de la villa José Muñoz Torres sitúa el primer dato histórico sobre la celebración de esta fiesta en 1575, aunque la fiesta se instituyó en 1369, y añade como “a partir del año 1603 es frecuente encontrar en los archivos parroquiales disposiciones de celebraciones de misas a la Virgen de la Paz como último deseo de los difuntos, con indicación de donaciones de tierra u otros bienes, de forma que, como se recoge en el catastro del Marqués de la Ensenada (1752), la imagen de la Virgen de la Paz es propietaria de terrenos rústicos y sujetos a contribuciones únicas”.
Muñoz Torres explica además que “de esta fecha (mediados del siglo XVIII), aproximadamente, son las relaciones del cardenal Lorenzana, a las cuales en uno de sus puntos contesta el prior fray Gregorio de Tejada que dice que tienen una parroquial, su vocación de San Juan Bautista e intramuros una ermita de Nuestra Señora de la Paz, especial devoción del pueblo, a quien tiene por patrona”.
Una devoción que hace emocionarse cada año a los miles de villarteros, residentes y ausentes, que se dan cita en sus fiestas patronales, a los que se suman cada año más visitantes foráneos, y que participan de forma muy activa en las múltiples actividades que se programan durante estos días festivos, quizá los más ruidosos e intensos de todo el año.