Uno de los más significativos fue el que se llevó a cabo en el Centro Ocupacional Rogelio Sánchez Ruiz donde usuarios de la institución acompañados de alumnos de secundaria del colegio Nuestra Señora del Rosario leyeron un manifiesto y realizaron una suelta simbólica de globos con mensajes en los que reivindicaban paz.
Precisamente a este acto acudió el alcalde criptanense, Santiago Lucas-Torres, junto a la concejala de Discapacidad, Ana Sánchez, y responsables de la Asociación Zaragüelles, encabezados por su presidente, Pedro Muñoz.
Lucas-Torres afirmó que la actividad había sido “un gesto muy bonito” porque “da muestras de la altura de miras de la sociedad criptanense, y especialmente de los jóvenes, que saben que la integración de las personas con capacidades diferentes debe ser lo más normal en la vida”.
El alcalde afirmó que con estas iniciativas “seguimos haciendo de Campo de Criptana una lanzadera en temas de solidaridad y voluntariado” y de ahí que “nuestro pueblo siempre sea referente en la región en participación de la población con todo tipo de colectivos ya sean discapacitados o mayores”.
Por ello, Lucas-Torres agradeció la colaboración de las asociaciones de padres y de los profesionales del Centro Ocupacional porque “gracias a vuestro esfuerzo habéis conseguido la normalización de nuestra sociedad”.
Por su parte, Pedro Muñoz indicó que esa actividad se unía a otras iniciativas como la elaboración de murales o el desarrollo de un taller de cocina con la paz como tema fundamental. Actividades que según los responsables del Centro Ocupacional han podido llevarse a cabo gracias a la colaboración de los profesores de la institución y a la implicación del Ayuntamiento ya que como manifestaba la educadora social del centro, María Isabel Palop “desde la educación queremos contribuir a concienciarnos en hacer un mundo mejor, y de ahí que queramos hacer partícipes también a las personas con discapacidad”.
Igualmente, los escolares del colegio público Virgen de la Paz, encabezados por la asociación de padres y madres del centro, se unían a la hermandad de la Santísima Virgen de la Paz, para realizar la tradicional ofrenda floral durante el transcurso de las fiestas populares organizadas en su honor.
Decenas de niños se desplazaron hasta la ermita situada en la Sierra de los Molinos para realizar la ofrenda que acompañaron además de cánticos y poesías en las que reivindicaban la paz y la solidaridad entre las personas.