Llevamos ya casi un mes inmersos en una vorágine de celebraciones navideñas con amigos, familia y compañeros de trabajo que no terminará hasta el roscón de Reyes. ¿Qué se puede hacer para poder superar con éxito este mes sin llegar a enero con los 2 o 3 kilos de más que de media engordamos en Navidad?
Lo primero es mentalizarnos, no caer en el típico pensamiento: aprovecho ahora para comer todo lo que quiero y a partir de Enero me pongo a dieta. Se trata de todo lo contrario, de estar alerta, y los días que no tengamos “celebración especial” llevar una alimentación muy equilibrada con pescado, frutas y verduras, y para beber agua, nada de alcohol.
Los días de las celebraciones cuidado con los aperitivos. Hay que saber que no constituyen la cena y en lugar de quitarnos el hambre con ellos, debemos espera un poco al plato principal. Si se pueden elegir mariscos, ahumados, mejillones o queso bajo en grasa mejor que mejor. Son aperitivos bajos en grasa y ricos en proteínas que harán que después se tenga menos apetito y se evitará comer en exceso.
En cuanto a los platos principales, de nuevo daremos preferencia al marisco y al pescado, con ensaladas o verdura de acompañamiento siempre que no sean en tempura y procurando evitar las salsas.
Respecto a las técnicas de cocinado, elijamos la plancha, el vapor y el horno evitando en todo momento los fritos y rebozados.
Y llegamos al postre. Inevitable probar algún dulce navideño, pero hay que saber que una porción de mazapán de aproximadamente 30 gramos tiene un valor medio de unas 147 kcal, que 50 gramos de turrón pueden tener 400 kcal y un polvorón unas 190 kcal. Conociendo esto, nos daremos cuenta de que podemos darnos el lujo de un dulce muy de vez en cuando y dar preferencia a la fruta como postre.
¿Y qué bebemos?
Inevitable también tomar una copita. El alcohol aporta una gran cantidad de calorías, denominadas “calorías vacías”, es decir, que no aportan ningún alimento o nutriente a nuestro cuerpo. En términos generales, a mayor graduación alcohólica, mayor aporte energético, ya que cada gramo de alcohol aporta siete kcal. Veamos algunos ejemplos según fuente del ministerio de sanidad
Un buen consejo por lo tanto es, si vamos a beber, que sea lo menos posible y mejor una copa de vino o cava que una bebida de mayor graduación.
A los excesos nutricionales se suma el abandono, en muchos casos, de los hábitos saludables, tendemos a interrumpir nuestra rutina deportiva y de actividad física. En esta época, sin embargo, es más importante que nunca cuidar los hábitos que se han venido teniendo durante todo el año. Si se tienen muchos compromisos sociales, lo recomendado es bajar la intensidad del ejercicio u optar por caminatas que permitan al cuerpo no perder la costumbre de ejercitarse e ir quemando las calorías de más.
En resumen y para terminar, con unas precauciones mínimas seremos capaces de llegar al día de Reyes sin muchos kilos extra y haciendo posible que la inevitable dieta de principios de año sea mucho más llevadera
DESDE EL COLEGIO DE FARMACEUTICOS FELIZ NAVIDAD A TODOS
Sagrario Pérez de Agreda Galiano
Farmacéutica adjunta