Grandísima noticia la que se producía este fin de semana en tierras albaceteñas en la penúltima jornada en el grupo 1 de la Liga Juvenil Preferente entre dos equipos que, a priori, se jugaban muchas cosas. El local, Al-basit, tenía que certificar la tercera plaza en la clasificación que le otorga jugar play-off y el Sporting de Alcázar que debía ganar si no quería jugárselo todo en la última jornada.
Los locales, quienes ya sabían el resultado de quienes podían arrebatarle la tercera posición, Hellín CF, afrontaban el choque con tranquilidad sabedores del pinchazo hellinero en Cuenca (2-2) lo que le daba la tercera plaza matemática sin jugar el partido. A pesar de ello, Al-Basit, puso en serios apuros a unos jugadores del Sporting que se les notaba en ocasiones algo nerviosos debido a lo importante del choque y de sacar las cosas adelante.
Juan Cristo en el minuto 38 adelantaba al Sporting, alegría que se tornó en preocupación cuando al filo del descanso, el central alcazareño, Carlos Molina, era expulsado por doble amarilla. Por delante, 45 minutos para aguantar el resultado ante un Al-Basit que no se jugaba nada más allá de ganar a un clásico en estas lides, el Sporting. El partido continuó con la tónica habitual y ambos entrenadores realizaron cambios, uno para intentar sostener la defensa y los locales para buscar el empate.
Avanzaban los minutos y cuando parecía que el 0-1 se daría por bueno, Francisco Javier García Espin, en el minuto 84 ponía el empate a 1 en el marcador derramando un jarro de agua fría a jugadores y aficionados alcazareños que se dieron cita en el José Copete de Albacete. Cabe destacar que en la grada de seguidores del Sporting, además de los habituales directivos, padres y amigos de los jugadores, se desplazaron hasta Albacete el equipo infantil de la Escuela de Fútbol de Alcázar, que no pararon de animar a ‘los mayores’ con banderas y gritos de apoyo.
Cuando la zozobra reinaba la grada visitante y ya en el tiempo de descuento, con un jugador menos y tras haber recibido el mazazo del empate, Juan Cristo conseguía la épica y anotaba el 1-2 con un golazo que bien valió el campeonato liguero y el ascenso matemático a liga nacional.
Poco más se jugó sobre el campo y cuando el árbitro señaló el final del partido, la euforia y la alegría de tanta tensión contenido se desataron entre jugadores y cuerpo técnico. Enorme trabajo del Cuerpo Técnico del juvenil del Sporting, encabezados por «la brújula», Marcos Alberca, el «brazo ejecutor», Álvaro Sánchez-Mellado Panzano y los ‘primerizos’, Jaime Úbeda y Javier Serrano.
Ahora, toca despedir el año celebrando como se merece este ascenso, primero acabando la competición este fin de semana ante Olímpico Villarrobledo y luego festejando y homenajeando a quienes han hecho posible esta vuelta a la Liga Nacional Juvenil.