Fin de temporada agridulce para el juvenil del Sporting de Alcázar. Los subcampeones del campeonato regular y candidatos al ascenso a Liga Nacional, fue perjudicado por la sorprendente vigencia aun del valor doble fuera de casa en este tipo de eliminatorias.

Los chicos de Álvaro Sánchez-Mellado y Marcos Alberca les tocaba remontar el 1-0 adverso del partido de ida en el “Fuente de la Niña” para lo cual debían de anotar un gol para, al menos, igualar la eliminatoria y ganar por más de dos goles de diferencia y evitar que el CD Guadalajara marcara en el Manuel Delgado Meco. Tarea difícil y normativa obsoleta que no se aplica ya en prácticamente ninguna competición, pero que por distintas circunstancias que se desconocen, en estas categorías continúa vigente.

Javier Rivas marcaba uno de los golazos de la temporada, en el minuto 54, con un disparo desde la frontal que hizo rugir unas gradas del Manuel Delgado Meco con casi 1000 personas en las gradas, “una de las mejores de la temporada y posiblemente de los últimos años”, según indican desde la directiva. Clara muestra del apoyo de la afición alcazareña y de la ilusión que estos jóvenes han levantado en los seguidores del Sporting de Alcázar.

Los alcarreños supieron reaccionar a tiempo y aprovecharon un desajuste defensivo para igualar, quince minutos después, el partido pero que desequilibraba claramente la eliminatoria a favor de los visitantes que obligaban a los alcazareños a anotar dos goles más para decantarla de su lado. Luego, varias acciones polémicas con un gol anulado por supuesto fuera de juego a los locales a los pocos minutos del final, desató la polémica en las gradas, un público entregado a empujar a los suyos a la remontada. En el minuto 90, Marcos Comino daba fuerzas a los suyos con el 2-1 pero a los pocos minutos de ese tanto que daba alas a los locales, el colegiado dio por finalizado el partido y con él firmaba la sentencia de una eliminatoria que benefició al Deportivo Guadalajara.