Devoción al patrón de los agricultores, remolques engalanados, ganas de pasarlo bien, comida típica manchega y de romería…, estos fueron algunos de los ingredientes que mezclaron los migueletes el día de San Isidro para disfrutar de esta fiesta y de la buena meteorología que hizo este día, declarado fiesta local en Miguel Esteban.
Desde la Iglesia, portados en hombros, salieron en procesión las imágenes de San Isidro y Santa María de la Cabeza, que fueron portadas en hombros hasta la ermita situada en la Pradera. Durante el recorrido, los patrones de los agricultores fueron acompañados por numerosos migueletes que después participaron de la romería para pasar un buen día en el campo con amigos y familiares. Y formando parte del desfile procesional, los tractores y remolques engalanados para la ocasión y para participar en el concurso que se organiza para esta festividad y que se podían contemplar con detalle en la Pradera de San Isidro, donde se desarrollaron otros actos tanto religiosos como festivos a lo largo del día.





































































