Según fuentes de la empresa suministradora de estas revistas, el pasado viernes se le requirió al Ayuntamiento el pago de estas publicaciones a través de un burofax, en el que se le daba un plazo de cinco días para satisfacer los 3.000 euros que era el coste de estas publicaciones.
Consideramos un hecho muy grave que si la empresa demanda esta cantidad es debido a que desde la Concejalía de Bienestar Social no se ha producido la devolución de estas revistas, como indicó los pasados días la concejala Cecilia Alcolea.
Mucho nos tememos que los ejemplares de estas revistas hayan acabado en algún rincón olvidado de dependencias municipales o, lo que sería más grave, en la basura.
Asimismo, lamentamos que la contestación de la Sra. Concejala a nuestra petición de dimisión estuviese llena de demagogia, mezclando diversos asuntos que, en ningún caso, tienen algo que ver con el tema que nos atañe.







































































