La Semana Santa de Daimiel ya se vive en la calle. Miles de daimieleños y daimieleñas, turistas y ausentes que aprovechan estas fechas han salido a la calle en la mañana del domingo para custodiar la primera de las procesiones: la Entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, conocida en Daimiel como “La Borriquilla”. A las 11:30 horas y puntual a la convocatoria, partía de la iglesia de Santa María La Mayor. Entre sus filas, niños y niñas vestidos de nazarenos y con su rama de oliva en la mano. Es su procesión. Una imagen inocente tan sólo solapada con las palmas que portaban padres y madres, además de muchos menores que participaban del desfile.
Circundando la parroquia se iniciaba un itinerario que prosiguió por calle Arenas, para seguir por Mártires, Plaza de España, General Espartero, Progreso y girar por calle José Ruiz de la Hermosa para irrumpir en plaza de San Pedro en cuyo templo concluía la procesión apenas una hora después.
Alrededor de una decena de niñas se sumaron vestidas de Samaritanas portando ánforas. Previamente, la banda de Cornetas y Tambores del Santísimo Cristo de la Columna y Nuestra Señora de la Amargura y Banda Municipal de Música de Daimiel y la Banda Municipal de Música.
A partir de ahí, miles de personas colmaron principalmente la zona centro en paseo y también consumiendo en su servicio de restauración y bares. La Oficina de Turismo permanece abierta asimismo para proporcionar información al turista.
“La Borriquilla”
Su origen se remonta a 1949. La imagen es un único paso que firman los Hermanos Rivas un año antes. Es impreciso el número de hermanos, porque se suman de todas las cofradías y hermandades daimieleñas. En concreto, representa la Sección Infantil de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Columna y Nuestra Señora de la Amargura, por lo que pertenecen a ella todos los hermanos de la Cofradía Matriz. Está presidida por Verónica Rodríguez-bobada Pozuelo.