Mar Delgado explicó en su intervención que UPyD apoyó al PSOE en su momento porque “pensamos que traerían nuevos aires para Socuéllamos y sería un Gobierno de colaboración y participación, para trabajar por el pueblo y dar una mejor calidad de vida a vecinos y vecinas”. Sin embargo, dijo que “nos desilusionamos cuando nos dimos cuenta que nuestra participación no era vista con buenos ojos y se negó la posibilidad para que todos los grupos participaran en la Junta de Gobierno, además de no tener en cuenta ninguna de nuestras propuestas, aunque fueran encaminadas a la transparencia, la participación ciudadana o hacia un gran pacto por el empleo y el desarrollo económico en la localidad”.
Las palabras de Delgado al respecto de los ocho meses de Gobierno socialista fueron muy duras, calificándolo como “un Gobierno oscuro, hermético y autoritario, que pecó de exceso de confianza y que será recordado como el mandato del estamos en ello”, refiriéndose a la respuesta que les daba la alcaldesa cuando solicitaban información sobre el estado de algunas cuestiones, “que en realidad quería decir no lo he hecho o no lo vamos a hacer”. También aseguró que, en estos meses, “lo único que han hecho ha sido terminar el trabajo que otros dejaron hecho, sin éxito, subirse el sueldo a la primera de cambio, adaptar reglamentos de otros pueblos que nada tienen que ver con Socuéllamos y competir por elaborar mejores programas de festejos, dejando de lado prioridades como el empleo, la educación, la sanidad…”.
Delgado concluyó diciendo que la motivación de UPyD es “cambiar las cosas, haciéndolas de otra manera que resulte positiva para la mayoría, algo que no ha hecho el PSOE, que estando en minoría, pretendía aprobar unos presupuestos sin contar con el consenso y la participación de todos los grupos”.
Criticó la actitud mantenida por los representantes del PSOE en las últimas dos semanas hacia su persona y su grupo, “con insultos, graves acusaciones, injurias, calumnias… intentando conseguir con violencia lo que no consiguieron con mentiras”. Este último comentario de la portavoz de UPyD despertó un gran revuelo en el salón de Plenos y el presidente de la mesa tuvo que llamar al orden y advertir de un posible desalojo.
Delgado defendió el sentido de su voto positivo a la moción de censura como “una oportunidad para volver a tener ilusión por el cambio y la regeneración democrática” y una muestra de “no ceder al chantaje sufrido en las últimas semanas”.







































































