El percance sufrido por el subalterno Roque de Vega a la salida del toro de Victorino Martín surgió cuando el animal empujó el burladero aprisionando la cabeza del subalterno entre las dos maderas y provocándole una fuerte hemorragia en la zona de la nariz. «Tuve suerte. Gracias a Dios no me partió el tabique. Me ha roto el cartílago, es muy doloroso pero no ha habido operación”.
Sobre el suceso y cómo ocurrió, el torero toledano afirma que «a la salida del toro de Victorino, lo llamé al burladero y éste lo hundió para adentro. Fue un momento de mala suerte”. No tardará en vestirse de luces, pues «reapareceré el próximo domingo, si todo va bien. Estoy con calmantes pero afortunadamente no ha sido nada para lo que podría haber ocurrido”.





































































