Antes de catar, los participantes aprendieron a diferenciar aromas que les permitan apreciar los detalles a la hora de beber un vino, para después probar varios vinos blancos y tintos con el objetivo de diferenciar aromas, identificar variedades de producción y, en definitiva, poner a prueba sus dotes catadoras.
Los tres mejores catadores se han llevado como premio sendos estuches de vino por cortesía de la DO La Mancha.





































































