La concentración se realizó en la explanada de la calle Eruelas a las 10 de la mañana, de donde los participantes se desplazaron en vehículos particulares a la parcela situada a unos dos km. de la población donde, con un clima soleado, se plantaron encinas y pinos carrascos de una sabia en las marras procedentes de la forestación realizada el pasado año sobre la misma parcela. Dicha parcela es propiedad del Grupo Salicor-Ecologistas en Acción, quien la viene poniendo a disposición de distintas actividades de divulgación mediambiental y es gestionada, en cuanto a su mantenimiento y riegos, junto a la asociación comarcal “Encinares Vivos de la Mancha”.
Como todos los años, hubo una charla previa a los participantes acerca de los pormenores técnicos de la plantación y, sobre todo de su sentido: comprender que nuestros campos necesitan árboles y que será posible que despierte el antiguo bosque manchego si entre todos empezamos a sembrarlos de encinas, coscojas y retamas.






































































