El desfile procesional está organizado por la Real Ilustre Antigua y Franciscana Hermandad Sacramental del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y María Santísima de la Concepción y Santa Vera Cruz con sede en la Iglesia de San Francisco.
Desde la Iglesia de San Francisco sale la procesión que la componen dos pasos. En primer lugar ha desfilado El Niño de la Santa Vera Cruz, que este año ha sido restaurado por el escultor e imaginero alcazareño Pedro Huertas Herrero. El niño ha sido vestido por Mari Carmen Leal Morollón y este año ha estrenado un pectoral representado el Cristo de San Damián.
El segundo paso en el desfile es el compuesto por los titulares de la Hermandad, el Cristo de la Buena Muerte que va acompañado por María Santísima de la Concepción, que este año 2018 ha estrenado una diadema, el rostrillo y una puntilla de encaje de bolillos para una camisa interior. La Sagrada Titular ha sido vestida por el escultor e imaginero Pedro Huertas Herrero y por el diseñador Guille Román Bustamante.
Junto al sonido de los pasos de los costaleros se ha escuchado el redoble de una campana y un cuarteto de instrumentos de viento.
Gran cantidad de público se ha congregado durante todo el recorrido procesional y entre todas esas personas ha destacado un devoto, que ha recitado unas palabras al Cristo de la Buena Muerte.
Debido a una emergencia sanitaria ocurrida en la calle Doctor Policarpo Lizcano a la hora de la salida de la procesión, el recorrido ha sido realizado al contrario de como estaba previsto, recorriendo Altozano de la Inmaculada, San Francisco, Plaza de España, Emilio Castelar, Tribaldos, Doctor Policarpo Lizcano, Altozano de la Inmaculada y Convento de San Francisco.