Cargando...Inmaculada Jiménez e Isi Serna realizan una visita a este programa de atención a la infancia en situación de riesgo de exclusión que une lo didáctico y lo divertido
Ayer martes daba comienzo el Campamento Urbano, un proyecto del centro municipal de Servicios Sociales dirigido a niños de entre 4 a 14 años de familias en riesgo de exclusión que une lo didáctico y lo divertido y en el que se quiere garantizar una comida digna. La alcaldesa de la ciudad, Inmaculada Jiménez, ha visitado esta mañana las instalaciones del colegio José Mª del Moral donde se están desarrollando las actividades previstas en este programa.
Acompañada por la concejala del Área, Isi Serna y por la directora del centro municipal de Servicios Sociales, Vicenta Romero, la alcaldesa ha tenido la oportunidad de conocer de primera mano cómo ha arrancado el programa, de intercambiar impresiones con los encargados de la atención a los niños y de visitar las dependencias donde se va a desarrollar el programa.
Con este Campamento Urbano, la idea del equipo de gobierno es proporcionar un espacio de ocio donde, entre otros objetivos, se fomente la creatividad y la autoestima por un lado, y por otro, valores como la tolerancia, la solidaridad y la responsabilidad. El proyecto permitirá que los niños reciban una atención lo más integral posible, incluyendo una alimentación adecuada, abarcando además una amplia variedad de juegos de habilidad y estrategia, deportes alternativos, piscina, gymkanas, juego de pistas, talleres creativos, juegos con paracaídas, música, dinámicas de grupo y expresión corporal, entre otras actividades.
Se trata de enseñar a los chicos a reutilizar su tiempo libre mediante actividades y juegos con los que trabajar los valores como el respeto, la amistad y la convivencia. Incluye servicio de comedor que dispone de un menú equilibrado y confeccionado teniendo en cuenta las edades de los niños para que la hora de la comida sea también un momento divertido. La actividad incluye servicio de transporte para la recogida de los participantes y la vuelta, una vez concluidas sus actividades diarias.
Los participantes son niños matriculados en educación infantil y primaria que han prorrogado la beca de comedor escolar durante el curso escolar para los meses de julio y agosto. El proyecto se llevará a cabo de lunes a viernes hasta el 14 de agosto con un horario de 11´30 a 13´30 h. para la realización de actividades y de 13´30 a 14´30 h. para el comedor. Un coordinador y 7 monitores de actividades juveniles, uno por cada 15 alumnos como máximo, ha sido el personal contratado para la atención de los 105 niños que se han inscrito en la actividad. Son 30 niños más que en el verano de 2016 cuando se puso en marcha el programa.
