Txus Leal Tejada, cuyas manos son más Mágicas que plásticas. Es un buen ejemplo de esa dualidad que a menudo sufren los artistas: Cálido de palabras, mirada y trato, a la hora de crear resulta frío de tan minucioso y analítico como es.
Txus Leal Tejada, en la exposición Benditas Locuras realiza su inquietud artística a través de los detalles del mundo que capta en sus modelos y en las inversiones sociales.
No es casual la elección del titulo de la exposición, ni su evocación del individuo con el medio en que convive y trabaja o el territorio en el que ha vivido y con el que sigue manteniendo una estrecha relación, serán algunos de los conceptos en los que se basa su obra, como resultado de una reflexión del devenir del ser humano y la evolución que ha tenido su cultura cinematográfica.
La propuesta expositiva se concreta a través de varias piezas con una estructura narrativa. Se utilizan las cualidades de simulación del hecho fotográfico para crear la identificación tan presente en nuestra cultura visual, entre representación del objeto, realidad y veracidad del hecho presentado. Los fotomontajes funcionan en la estructura de la exposición como fragmentos extraídos de un documento de video, que suele exhibirse junto al soporte original.
La obra de Txus leal Tejada, se convierte en un juego a tres bandas, — reflexiona sobre el presente, el pasado y el futuro — la realidad y la ficción, la creación y la memoria. Ha cultivado la fotografía aunque la parte fundamental de su obra son videos. Siendo el gran creador del SUEÑO DE LOS INVIDENTES, siendo una de las constantes en la obra de Txus la importancia de la perspectiva, que sitúa al espectador en distintas posiciones respecto de la obra.
El resto, ya depende de la mirada del “otro”.







































































