Este 5 de octubre celebramos el Día Mundial de los Docentes, que este año lleva por lema de la UNESCO: “La colaboración es clave para que los docentes prosperen”. Un mensaje que recuerda algo evidente para quienes vivimos cada día en las aulas: sin apoyo real, recursos adecuados y condiciones dignas, la educación no puede avanzar.
La Cumbre Mundial de la UNESCO sobre Docentes alertó de que el mundo necesitará 44 millones de docentes adicionales de aquí a 2030 para garantizar el derecho a una educación de calidad. Esa cifra refleja lo que ya sentimos en España y ANPE sigue evidenciando: faltan medidas valientes que sitúen al profesorado en el centro del sistema.
Desde ANPE creemos que este día no es solo para celebrar nuestra labor, sino también para reivindicar lo que necesitamos como docentes:
- Un pacto educativo estable o un acuerdo de mínimos, que dé continuidad al sistema y acabe con las leyes educativas cambiantes con cada gobierno.
- Un Estatuto Docente real, que regule nuestra formación, acceso, carrera profesional, reconocimiento entre otros aspectos.
- Menos burocracia y más tiempo para enseñar, porque nuestro lugar está con el alumnado, no en los despachos.
- Mejores condiciones laborales y recuperación del poder adquisitivo, perdido desde 2010.
- Centros bien equipados y con recursos humanos suficientes(orientadores, especialistas, personal de apoyo) para atender a centros cada vez más diversos.
- Espacios para el desarrollo profesional que fomenten la innovación y el acompañamiento docente.
Los docentes no solo transmitimos conocimientos: construimos ciudadanía, fomentamos la igualdad y acompañamos procesos personales que marcan la vida de nuestro alumnado. Pero también queremos dejar claro que la sociedad y las instituciones deben correspondernos con hechos. Reconocer al profesorado no puede quedarse en solo palabras: hacen falta políticas reales, recursos sostenidos y respeto a nuestra voz profesional.
En este 5 de octubre, desde ANPE queremos agradecer la dedicación diaria del profesorado en toda España, su compromiso con la enseñanza pública y su capacidad para resistir, innovar y adaptarse incluso en contextos difíciles. Por ellos, reiteramos nuestro compromiso con la defensa de la enseñanza pública y con la dignificación de la profesión docente. Porque solo si el profesorado prospera, la educación prospera.