El molino Inca Garcilaso, situado en la Sierra de los Molinos de Campo de Criptana, ha recuperado su conjunto de aspas tras la actuación de reposición realizada después de los daños provocados por una fuerte tormenta de viento el pasado 5 de julio, que ocasionó la rotura del eje y la caída de las estructuras al suelo.
La intervención ha sido financiada por el Gobierno de Castilla-La Mancha, con una inversión de 28.000 euros procedentes de fondos europeos MRR, y ha permitido restituir uno de los elementos fundamentales de este bien patrimonial, integrado en uno de los conjuntos molineros más representativos de la región.
El alcalde de Campo de Criptana, Santiago Lázaro, ha señalado que la reposición de las aspas era prioritaria para recuperar la imagen del molino dentro del conjunto de la sierra y ha destacado la coordinación entre el Ayuntamiento y la administración regional para ejecutar la actuación en un plazo reducido.
Los trabajos han consistido en la sustitución del eje y de las cuatro aspas, una labor técnica llevada a cabo por el molinero Juan Bautista Sánchez, siguiendo los criterios de conservación establecidos para este tipo de bienes históricos.
Actuación financiada con fondos europeos
La viceconsejera de Cultura, Carmen Olmedo, ha explicado que la inversión ha cubierto la totalidad del coste de la reposición y forma parte de los fondos MRR de la Unión Europea, gestionados por el Gobierno regional entre los años 2023 y 2025.
Según ha detallado, esta actuación se integra en un conjunto de intervenciones destinadas a la conservación y puesta en valor de bienes de interés cultural en Castilla-La Mancha, orientadas a garantizar su mantenimiento y funcionalidad.
Con la reposición de las aspas, el molino Inca Garcilaso vuelve a presentar su configuración completa, recuperando su presencia dentro de la Sierra de los Molinos y asegurando su adecuada conservación tras los daños sufridos durante el episodio meteorológico del pasado verano.






































































