Quienes producen y comercializan productos alimentarios deben garantizar la seguridad y la calidad a los consumidores. Esto depende no sólo de la producción y el cuidadoso control del propio producto alimentario, sino también de otros factores, principalmente la elección de un envase primario seguro.
El envase primario es el recipiente – lata, caja, botella, bolsa – que contiene directamente el producto y, por tanto, entra en contacto directo con él. Para que sea realmente seguro, debe poseer características que garanticen la perfecta conservación de los productos hasta su consumo. Entre los materiales más adecuados para este fin se encuentra el vidrio.
Inerte, altamente higiénico e incluso ecológico, este material es ideal para contener un gran número de alimentos, desde aceite de oliva hasta conservas. Además, su elegancia y versatilidad lo convierten en la elección número uno para los fabricantes que desean comercializar no sólo excelentes alimentos, sino también productos contenidos en envases de diseño intrigante. Por supuesto, para obtener los mejores resultados es necesario recurrir a expertos en el sector, como por ejemplo los Productos Vetroelite: envases de vidrio de alta calidad que pueden personalizarse por completo gracias a la experiencia y los conocimientos de un equipo formado y profesional.
A continuación, analizaremos en detalle las ventajas de los envases de vidrio para alimentos.
Material seguro e inerte
La primera gran ventaja de los envases primarios de vidrio proviene de una interesante propiedad de este material: su inercia química. Esto significa que cuando entra en contacto con cualquier tipo de producto, incluso productos especialmente ácidos o alcalinos, no se altera ni libera ningún tipo de sustancia. La consecuencia es que los productos – por tanto, también los alimentos – almacenados en recipientes de vidrio no se alteran y conservan su sabor, aroma y olor.
Además, el vidrio es también un muy buen aislante térmico, excelente para conservar los alimentos a la temperatura adecuada, y no deja pasar líquidos ni gases. Por último, al no ser poroso, es fácil de lavar y, por tanto, muy higiénico.
Totalmente reciclable, pero también reutilizable
Elegir el vidrio como material para el envasado primario de alimentos no sólo es una excelente opción para garantizar que los consumidores lleven a sus mesas productos seguros y de calidad, sino que también es una decisión sostenible desde el punto de vista medioambiental. De hecho, este material es bien conocido por ser 100% reciclable.
Su larga vida útil y su facilidad de lavado también lo convierten en un material que puede reutilizarse infinitas veces, además de ser perfecto para actividades creativas de reciclaje.
Elegantes y personalizables
Los especialistas en este campo son capaces de crear envases de vidrio que no sólo son seguros y ecológicos, sino también elegantes y personalizables. No sólo la forma y el tamaño, sino también el acabado puede personalizarse y adaptarse al espíritu de la marca y el producto. Recurriendo a colores, texturas, impresiones, decoraciones y etiquetados especiales, cualquier fabricante puede llevar a las estanterías de las tiendas envases de vidrio que llamen la atención e impulsen a los consumidores a comprar.