Este fin de semana en Quintanar de la Orden han dado comienzo las fiestas en honor al Stmo. Cristo de Gracia, Patrón de la localidad. Dentro de los actos programados, en la tarde del domingo 7 de septiembre tuvo lugar un concierto en la Ermita de Intramuros.
El evento reunió a la Agrupación Musical Virgen de las Angustias y al Coro de Hakuna de Quintanar, que ofrecieron un recital lleno de emoción y sentimiento. La ermita se abarrotó de público, entre ellos varios concejales de la Corporación Municipal.
Antes de iniciar el concierto, la Hermandad Mayordomía Virgen de la Piedad y Cristo de Gracia dio la bienvenida a los asistentes y presentó a ambos grupos, destacando la iniciativa del Mayordomo Mayor, David Botija, de unir por primera vez a estas dos formaciones en concierto.
Las actuaciones se desarrollaron de forma intercalada. El Coro de Hakuna, con sus voces angelicales, interpretó canciones modernas de inspiración religiosa como fueron “Trueno”, “Nada”, “Papá”, “A ti te alabo” o “Madre de Hakuna”, con la que el público, puesto en pie, dedicó un emotivo homenaje a la Virgen de la Piedad, Patrona de Quintanar.
Por su parte, la Agrupación Musical Virgen de las Angustias, con sus magníficos acordes e instrumentos, ofreció un repertorio de marchas procesionales, entre las que se encontraban “En vos confío”, “Gustad y ved”, “Mi Cristo de bronce”, “Al Rey de los reyes” y “Esperanza de María”, con la que despertaron una gran ovación de los asistentes.
Antes de finalizar el concierto, Zacarías López-Barrajón, presidente de la Hermandad, agradeció la presencia del público y la participación de los grupos. A continuación, el Mayordomo Mayor, visiblemente emocionado, subrayó la importancia histórica del acto, ya que por primera vez se ha colocado la imagen del Cristo en una base para acercarla más al pueblo y animó además a los vecinos a acompañar al Stmo. Cristo de Gracia en la procesión del próximo fin de semana.
Como recuerdo, ambos grupos recibieron una medalla de la Hermandad.
La jornada finalizó con el reparto de zurra y un aperitivo ofrecido por la Hermandad, poniendo el broche a un concierto mágico y cargado de emoción que quedará en la memoria de los quintanareños.