El Alcázar CFD conseguía una nueva victoria frente al equipo de La Puebla de Almoradiel CF en un emocionante partido correspondiente a la jornada número 7 de la Liga de Segunda Autonómica Grupo 3. El encuentro comenzó con un ambiente vibrante en las gradas, con la presencia de invitados de colegios, en esta ocasión de la Sagrada Familia y el Colegio Alces, lo que creó un ambiente de fútbol que se vivió en el Manuel Delgado Meco de Alcázar de San Juan.
Desde los primeros minutos, el equipo local se mostró como el claro dominador de la primera parte. Controlaron el juego de principio a fin, y pronto encontraron su recompensa cuando el delantero local Santi, en el minuto 8, transformó un gol tras un pase a la espalda de la defensa del Puebla, llevando la alegría a las gradas del Municipal. El equipo local siguió presionando y creando oportunidades, pero no lograron ampliar su ventaja en la primera mitad.
En el minuto 28, Santi anotó su segundo gol del día tras un saque de falta con una vaselina al portero, llevando el marcador a 2-0 al descanso, un reflejo justo de lo que se había visto en la primera mitad.
La segunda mitad comenzó con cuatro cambios en el equipo visitante en un intento de cambiar la dinámica del partido. Esto pareció darle un nuevo impulso al equipo visitante, que creó oportunidades y presionó a la defensa local. Sin embargo, el Alcázar tuvo la primera ocasión con una mano a mano de Santi que no logró convertir en gol.
El partido tomó un giro desafortunado cuando Sergio del Alcázar sufrió una lesión en una disputa con un jugador visitante, resultando en una fractura en el radio de la mano derecha. Después de este incidente, el equipo local perdió momentáneamente el control del juego.
El delantero del Puebla tuvo una oportunidad para igualar el marcador, pero su disparo se estrelló en el poste. A pesar de estar en desventaja numérica debido a la lesión de Borja, el Alcázar, que ya no tenía más cambios disponibles, se mantuvo firme en defensa.
Sin embargo, el Puebla acortó distancias con un gol después de un rechace, convirtiendo el marcador en 2-1, lo que creó incertidumbre tanto en las gradas como en el equipo local.
El técnico visitante fue expulsado por protestar al árbitro, quien anunció 5 minutos de tiempo añadido. En los momentos finales, el capitán Alex Palage sentenció el partido con un tercer gol, llevando el marcador a 3-1 y desatando la alegría en las gradas, que registraron una buena asistencia de alrededor de 300 espectadores.









































































