La propuesta de UCIN de crear concejales de barrio consiste en asignar un barrio, junto con otras atribuciones, a diferentes ediles para que mantengan reuniones periódicas con vecinos y colectivos y atender, de este modo, sus demandas y sugerencias. “No se trata de hacer un trabajo de despacho, sino de estar en la calle”, señaló Montealegre que expuso que estos concejales, además de escuchar las propuestas ciudadanas, “deberán hacer visitas a los barrios para comprobar in situ el estado de las calles, limpieza, mobiliario urbano, etc. para resolver con rapidez las carencias y problemas que se detecten. Igualmente, cada concejal se encargará de habilitar la partida presupuestaria correspondiente para atender las prioridades de los barrios.
En relación a la participación UCIN contempla otras dos medidas más como la Participación 2.0, para que vecinos y vecinas puedan plantear telemáticamente sus preguntas en los plenos municipales, para lo que señaló “hay que cambiar el reglamento de funcionamiento del Ayuntamiento”. La forma de articular esta propuesta es a través de video-preguntas en la web del Consistorio o por medio de correos electrónicos, valorando el orden de presentación y limitando el número de preguntas por pleno. Otra de las medidas para “generar confianza y fomentar la participación de los vecinos” pasa por “hacer entendibles los presupuestos municipales”, especificando todas las partidas con detalle, tanto en ingresos como en inversiones y hacerlos públicos en la web municipal.





































































