La Fiesta del Mayo Manchego, cuyo principal motor son las tradiciones populares y el folclore, ha conseguido adaptarse a los tiempos y ofertar variadas actividades que siguen enganchando a las generaciones más jóvenes, el futuro de este evento que va impreso en el ADN de los pedroteños y que define sus raíces. Este es el sentir de todo el pueblo de Pedro Muñoz que, a través de su concejala de Festejos, Marisol Izquierdo, se plasma ahora en manchainformacion.com
Aunque Los Mayos se enmarcan dentro de la Noche de Ronda y el Festival de Folclore, del 30 de abril al 1 de mayo, las semanas previas ya son toda una fiesta en Pedro Muñoz. Así, como principal novedad en esta LIII edición, durante las últimas tres semanas, desde el 16 de abril, se está viviendo el Mayo Joven. Actividades culturales, deportivas, sociales y, por supuesto, folclóricas, consiguen involucrar a los jóvenes de la localidad, aún más si cabe, con la tradición y el mantenimiento de esta fiesta. Este es el objetivo del Mayo Joven que da a conocer a los artistas locales de menor edad, adapta al oferta cultural y lúdica a los gustos de este colectivo (monólogos, cortos, etc.) vinculándola con la tradición de Los Mayos.
Los niños de los colegios también tienen su sitio en la fiesta, “ellos son nuestro futuro y la garantía de la conservación de nuestra identidad”, asegura Izquierdo. Entre las actividades programadas para ellos, como cada año, el 29 de abril se encargarán de confeccionar el gran mural de ‘Somos Mayo’ que preside la carpa, realizado siempre con materiales reciclados (en esta ocasión vasos y platos de plástico). También tienen su propia ronda, la Ronda Infantil, que realizan por las casas de las mayeras infantiles. Como novedad, en esta edición, plantarán el 30 de abril la semilla de la que será declarada ‘Flor de Mayo’; un alhelí que cultivarán y cuidarán en sus propias casas para mostrarlo florecido el próximo año. “Es una actividad muy bonita que queremos instaurar y que, además de reforzar la tradición del Mayo Manchego, transmite valores relacionados con el medio ambiente y la importancia de las plantas”.
La gastronomía es otro punto fuerte en la fiesta pedroteña, desde el Manchego Chef Joven, en el que jóvenes cocineros de la localidad preparan en la Plaza de Toros platos tradicionales que luego son degustados; pasando por los concursos gastronómicos de gachas y pisto, las lumbres y cocinas tradicionales; hasta la muestra gastronómica en la que se exhiben los mejores productos locales, principalmente vinos y productos de elaboración artesanal.
Otra novedad este año será la recreación de “Pasajes de antaño y Vinos de hogaño”, que no es otra cosa que la recreación de una casa de labranza del siglo pasado, con su cocinilla, su banca, el fuego bajo, una máquina de coser y otra de hacer chorizos, cuadra, mulas, etc., en la que la gente podrá tomarse sus fotografías y concluir catando los vinos del año. Una original idea que podrá disfrutarse entre los días 29 y 30 de abril.
Noche de Ronda
Pero, sin duda, es en la Noche de Ronda cuando se mezclan todos los valores que representan el Mayo. Tradición, gastronomía, folclore y solidaridad. “Para la gente que no es de Pedro Muñoz es muy difícil entender que las mayeras abran sus casas, durante toda la noche, para ser rondadas y ofrecer comida y bebida a todos los que se acercan. Es algo que no se puede explicar, hay que vivirlo”. Una ronda que finaliza con la luz del día 1 de mayo, tras rondar y cantar los mayos a las nueve jóvenes que representan la belleza, el trabajo y la dedicación al pueblo de Pedro Muñoz. “Es una noche mágica, la más especial del año”, siente la concejala que asegura que “todo el que viene de fuera y participa, que cada vez son más, normalmente repite”.
Festival
Tras la ronda, el 1 de mayo se celebra el Festival del Mayo Manchego, por el que el Ayuntamiento está luchando para conseguir sea declarado de Interés Turístico Nacional. En él participan los mejores grupos de folclore de Castilla La Mancha y algún invitado de otra comunidad autónoma foránea. La Plaza de Toros se llena de gente de todas las edades para compartir y vivir este evento tradicional “que forma parte de nuestras raíces y de nuestra identidad”. Los pedroteños defienden y viven este festival con tanta intensidad, que ya desde pequeños aprenden los bailes y cantos tradicionales en la Escuela de Folclore que cuenta con más de 100 niños. “Creo que cada familia del pueblo tiene algún niño en la escuela o algún familiar en el grupo. Así es difícil que se pierda nuestra identidad”.
La lucha por mantener la identidad cultural y conservar el patrimonio inmaterial de Pedro Muñoz no es sencilla, más aún cuando se pretende expandir la fiesta y el festival más allá de la localidad, como hace el Ayuntamiento que confía en conseguir la declaración de Interés Turístico Nacional en no más de dos años.
Hermanamiento con Haute-Goulaine
Pedro Muñoz está hermanado con el pueblo francés de Haute-Goulaine, hasta el punto que todos los años los habitantes de este lugar galo visitan la localidad coincidiendo con la Fiesta del Mayo Manchego, que viven con la misma o más intensidad que los propios pedroteños.
El 29 de abril, será la recepción oficial de sus hermanos que cantarán y disfrutarán de la Noche de Ronda y del Festival como uno más. Este año, con una curiosa iniciativa. Pascal Jacopy, vecino de Haute-Goulaine, ha decidido llegar hasta Pedro Muñoz montado en su mobylette, recorriendo los 1.200 Kilómetros que separan a estos dos pueblos hermanos.
La concejala de Festejos invita a la gente de pueblos vecinos a “vivir el Mayo Manchego” y, a sus vecinos, a disfrutar y a participar en todas las actividades organizadas, especialmente las más tradicionales. “ Que el 1 de mayo saquen las joyas que tienen guardadas en los baúles, esos trajes tradicionales que son una maravilla, algunos auténticas obras de arte. Que los luzcan con orgullo y vayan con ellos a la Plaza de Toros a disfrutar del festival. Tendrán seguro un detalle a su llegada”.
Detalle del que también podrán disfrutar, si se animan, los visitantes que quieran disfrutar de esta tradición integrándose en la fiesta.