No nos damos cuenta, o pasamos por alto, que el señor que nos pide el billete, el interventor, no solo sirve para pedirnos el billete en un vagón del tren, significa mucho más para nosotros. Habiendo mantenido la calma en todo momento y moviendo los hilos necesarios, solicitando asistencia médica urgente para una rápida situación de auxilio. Hoy puedo escribir estas palabras gracias a esta persona, el ángel que tuve aquel día a mi lado en el vagón del tren.
Nunca olvidare al interventor del tren 18027 perteneciente a Renfe, cuya placa identificativa (P.M. MONTALVO), y de cómo actuó en ese momento tan difícil y en una situación tan crítica para mi eternamente agradecida J.O.O
Joanna Olivares