Martínez señalaba que, aunque aún es pronto para hacer un balance real porque los nuevos contenedores se instalaron hace tan sólo un mes, “estamos muy contentos porque los ciudadanos están respondiendo muy bien y están colaborando depositando tanto la ropa que ya no les sirve como el aceite usado, en los lugares habilitados para ello”.
El responsable de Medio Ambiente recordaba que el aceite usado causa un gran daño en las tuberías de fregaderos o inodoro además de perjudicar seriamente el medio ambiente, y agradecía a sus vecinos “su sensibilidad medioambiental y el correcto uso que están haciendo de los contenedores”.
Asimismo, Victoriano Martínez indicaba que “el reciclaje de ropa usada tiene un fin solidario además de medioambiental”, ya que el 47% de la ropa recogida se destina a países de África, un 12% de la misma se vende en tiendas de la Fundación Prohumana (que se encarga de la recogida y de la clasificación de la ropa) con el fin de conseguir dinero y destinarlo a proyectos que se llevan a cabo en países subdesarrollados, y el resto se destina a Cáritas y al reciclaje.
En este sentido, el responsable de Medio Ambiente apuntaba que en la última semana, los cuatro contenedores de ropa usada existentes en el municipio recogieron un total de 250 kilos.
Los contenedores para el reciclaje de aceite vegetal de uso doméstico, que tienen capacidad para almacenar 1.000 litros de aceite, son de color rojo y se han ubicado en el Mercado Municipal, en la Plaza del Pilar y en la Plaza del Agua. Si los resultados son positivos, se instalarán otros tres contenedores más.
Por su parte, el nuevo contenedor para el reciclaje de ropa se ha instalado en el Mercado Municipal y se suma a los ya existentes en el Colegio Público ‘Nuestra Señora de la Muela’, en la Plaza del Pilar y en el punto limpio.