


La corrida total de Illescas se ha convertido en una cita con la verdad de la fiesta y en esta segunda edición ha tenido mayor importancia tras ser un homenaje al recientemente fallecido Victorino Martín Andrés.
Desde el minuto de silencio tras deshacerse el paseíllo hasta la salida en hombros del mayoral acompañando a Emilio de Justo y Pepe Moral se han vivido momentos emocionantes llegando al punto álgido del indulto del quinto de la tarde.
“Jarretero” fue un toro muy bien hecho, con trapío y nobleza encastada que tomó dos buenos puyazos de Francisco Romero y que se vino alegre en banderillas tanto a los pares de Vicente Varela y Fernando Sánchez, como al capote de Raúl Cervantes quien lo llevó siempre largo y muy templado y donde ya denotó su clase en las embestidas.
Con estos prolegómenos, Pepe Moral tenía claro que era un toro de triunfo grande y lo aprovechó toreándolo a placer rindiendo también su particular homenaje a su maestro Manolo Cortés y al ganadero recientemente fallecido. El sevillano se vació toreando sobre todo al natural, dando importancia a la franca embestida del bravo toro, que si tuvo un pero fue la justeza de fuerza, que hacía que si no lo llevaban muy templado perdiera las manos. «Jarretero» embestió con una calidad extraordinaria, muy humillado y siguiendo embelesado los vuelos de la muleta de Pepe Moral. Aunque también es cierto que el torero, a veces, en los comienzos del muletazo pecaba de citar al hilo del pitón pero al final terminaba con el toro totalmente enroscado, habiéndoselo pasado muy lento y muy templado. Por lo que la faena caló hondo en los tendidos y pronto empezaron a surgir las primeras voces de «no lo mates». Llegando la petición y concesión del indulto por la mayoría, pero también con algunos aficionados que se oponían al hecho del perdón de la vida por opinar que el toro no era lo suficientemente completo y el premio de la vuelta al ruedo podría ser más ajustado.
Pepe Moral también cortó otras dos orejas de su primero, tras otra faena entonada a un victorino reservón.
Emilio de Justo, comenzó con el primero de la tarde con unos doblones muy toreros, pero luego la faena no pudo alcanzar el éxito ya que el toro se quedaba corto y reponía pronto. Al cuarto de la tarde si le cortó las dos orejas tras trasteo emocionante por el picante del toro que hacía que si no lo llevaban muy tapado se quedaba descubierto y se lo echaba a los lomos como ocurrió en tres ocasiones. El extremeño no se arrugó en ningún momento plantándole batalla y evidenciando que también es un torero que pide más oportunidades, sobre todo en España.
Y cerraba el cartel Martín Escudero que se llevó el lote menos lucido, pero que aun así hizo un toreo clásico y ortodoxo, citando siempre muy cruzado y de quietud de plantas. Otro torero que si la suerte le acompaña puede crecer y funcionar entre los matadores de toros.
FICHA DEL FESTEJO
Sábado 7 de octubre de 2017. Plaza de toros de Illescas (Toledo). II Corrida Total. Casi lleno en los tendidos. Buena temperatura con la cubierta de la plaza abierta.
Toros de Victorino Martín, bien presentados y de juego desigual. 1º, con el pitón derecho roto, manso y encastado; 2º noble y reservón; 3º humillador y soso; 4º de embestida muy «asaltillada»; 5º bravo y enclasado, indultado; y 6º soso y de corto recorrido.
Emilio de Justo (azul marino y oro): seis pinchazos y estocada, aviso y silencio; media y un descabello, dos orejas.
Pepe Moral (tabaco y oro): estocada trasera y desprendida, dos orejas; indulto y dos orejas y rabo simbólicos.
Martín Escudero (azul turquesa y oro): media estocada, oreja; estocada atravesada que hace guardia y estocada desprendida, aviso y palmas.
Cuadrillas. Destacó la cuadrilla completa de Pepe Moral: los picadores Alberto Sandoval y Francisco Romero y los banderilleros Vicente Varela, Raúl Cervantes y Fernando Sánchez. Germán González picando al primero. Y José Antonio Carretero clavando y Rafael González lidiando al tercero. También Morenito de Arles se desmonteró tras parear al cuarto.
Se guardó un minuto de silencio en homenaje a Victorino Martín Andrés y los toros lucieron divisa negra. Victorino Martín hijo recibió el brindis de los tres primeros toros.
Al final del festejo salieron por la Puerta Grande Emilio de Justo, Pepe Moral y el mayoral de la ganadería.









































































