Los Servicios de Traumatología, Anestesiología y Neurología del Hospital General de Tomelloso, dependiente del Gobierno de Castilla-La Mancha, han incorporado a la cartera de servicios del centro cirugía de columna de alta complejidad para la que es necesaria contar con recursos tecnológicos y humanos especializados.
La coordinación de estos tres servicios ha hecho posible realizar las primeras intervenciones correctoras de deformidades vertebrales toracolumbares, una operación compleja porque aborda patologías de la parte alta de la columna que presentan grandes factores de riesgo neurológico y mecánico.
La cirugía ortopédica toracolumbar se emplea para corregir deformidades como la cifoescoliosis con estenosis del canal medular (estrechamiento del canal medular en un segmento concreto que disminuye el espacio disponible para la médula y la raíz espinal y que provoca gran dolor en el paciente) y para extirpar tumores en la zona cérvico-torácica donde puede existir riesgo de lesión medular.
Estas técnicas son complejas y precisan un conocimiento y entrenamiento alto para poder realizarlas con un buen resultado final. También necesitan de una correcta monitorización anestésica y neurofisiológica durante toda la intervención para prevenir posibles complicaciones durante la cirugía y asegurar el éxito de la operación.
La dotación tecnológica del Hospital General de Tomelloso ha permitido contar con este requisito ya que dispone de equipamiento de monitorización neurofisiológica intraoperatoria mediante potenciales evocados, una tecnología encaminada a preservar la integridad del sistema nervioso durante la intervención cuyo uso reduce la incidencia de lesiones neurológicas.
Para la utilización de esta tecnología es necesaria la colaboración del Servicio de Neurología que aporta a este equipo multidisciplinar un neurofisiólogo con experiencia en esta técnica de monitorización.
El grado de preparación técnica y científica, el impulso, la coordinación y el entusiasmo de los profesionales de los tres servicios así como de los profesionales de Enfermería y Auxiliares del Bloque Quirúrgico y la Unidad de Reanimación han sido claves para el inicio de este tipo de intervenciones en el centro sanitario.
La incorporación de esta técnica beneficiará a los pacientes del área de influencia del hospital que no tendrán que desplazarse a otros centros sanitarios para operarse de patologías que requieren de este tipo de intervenciones.
