A las 20:00 horas el alcalde de Argamasilla de Alba, Pedro Ángel Jiménez, pedía a los empleados municipales que procedieran al encendido de la hoguera en un año donde ha predominado la austeridad, acorde con la situación económica actual.
Tras el encendido de la municipal, decenas de hogueras organizadas por establecimientos, bares, vecinos o asociaciones fueron prendiendo las lumbres que iluminaron la noche argamasillera.
El frio y la amenaza de lluvia no mermaron las ganas de celebrar una fiesta que desde hace unos años está resurgiendo en la localidad, adquiriendo de nuevo el arraigo que tuvo años atrás.
Después de la noche de las hogueras llegó el día de San Antonio Abab patrón de los animales domésticos, con tal motivo, el párroco local, Juan Carlos Torres, ofició una misa en la ermita del santo, para posteriormente salir a bendecir a las decenas de animales que impacientes le esperaban.





































































