Al unísono un magnífico colorido de un gran mercado a semejanza de la época cervantina en el centro del conjunto patrimonial toboseño, está siendo visitado por numerosos turistas que también degustan la gastronomía basada en cocina que nos muestra el Quijote.
En su recta final quedan por celebrarse nueve entremeses, cuentos infantiles y la Ronda nocturna dónde Quijote y Sancho irán en busca de Dulcinea.
Con gran admiración se contempla la exposición de animales de cetrería desde águilas, lechuzas, halcones, gavilanes conjuntamente con el mercado cervantino por un cetrero toboseño que orgullosamente los muestra a los miles de visitantes que han pasado ya en estos agradables días con unas magníficas noches que invitan a pasear por las intimistas calles y plazas toboseñas.





































































