En el comunicado de prensa, la Plataforma contra la privatización de Aguas de Alcázar expone los siguientes puntos:
1. «La vía elegida por el Gobierno Local para remunicipalizar Aguas de Alcázar, compartida por los componentes de la Mesa del Agua (incluida la Plataforma), era la de anular el contrato con Aqualia a través de la revisión de oficio del Consejo Consultivo. Se apoyaba esta vía en la aplicación del efecto cascada a partir de la sentencia firme que anuló la sesión de Pleno en la que se había decidido la transformación de la empresa de pública a público-privada».
2. «El Consejo Consultivo no da la razón al Ayuntamiento y establece que no hay un posible efecto cascada. Con este dictamen, el Consejo Consultivo cierra la vía elegida. Esta vía era la más segura, la más rápida y la más barata. Ahora hay que buscar nuevas soluciones. Pero está claro que el trabajo realizado por todos hasta aquí ha acabado en un fracaso. Cualquiera puede reconocerlo o no reconocerlo, eso no hará que deje de ser un fracaso».
3. «El día 5 de febrero de 2016 se celebró una sesión de la Mesa del Agua en la que el Gobierno informó de que se había acordado esa misma mañana la firma de un protocolo de colaboración con la Fundación Nueva Cultura del Agua para asesoramiento en el proceso. La Plataforma se enteró allí mismo, junto con los demás miembros de la Mesa. Nunca sugirió la Plataforma que se colaborase con esa entidad, aunque se valoró positiva su asistencia. Llamar a la Fundación Nueva Cultura del Agua fue una idea y una decisión exclusivamente del Gobierno Local, aplaudida entonces y ahora por la Plataforma».
4. «La Asamblea de la Plataforma entiende que, en el momento presente, los que han estado al frente del asesoramiento en el proceso, deben dejar paso a otros. Se pide que la concejala de servicios jurídicos y el concejal de aguas abandonen esas delegaciones. No se pide que abandonen las concejalías, sino que dejen esas delegaciones en manos de otros. La instructora del proceso ha sido la Secretaria Municipal. Aunque se trata de un puesto técnico, ella lo ocupa por decisión política (primero de Diego Ortega y después de Rosa Melchor). El Consejo Consultivo echa por tierra gran parte de las decisiones que ella auspició e informó. Entendemos por ello que sería lo mejor que abandone las funciones de Secretaría».
5. «El proceso no ha acabado. Aqualia tiene que abandonar Aguas de Alcázar, porque supone un obstáculo para el desarrollo del servicio común y su único objetivo es el beneficio económico a costa del perjuicio para nuestra ciudad. Cualquier vía que suponga un avance en el propósito de echarla de aquí tendrá el apoyo de la Plataforma. Invitamos a todos los ciudadanos interesados a acudir a las concentraciones de los viernes o a las asambleas de los lunes en el Centro Cívico. Todas las dudas y sugerencias serán tenidas en cuenta siempre», concluye el comunicado.








































































