Melchor, Gaspar y Baltasar han ido saludando al numeroso público que se ha concentrado durante el recorrido que, desde la ermita de San Pedro, ha bajado por la calle Madrid para seguir por las calles Cristo de Villajos y Soledad hasta llegar a la Plaza Mayor para finalizar en el Ayuntamiento con sorpresas para los niños.
Aunque las previsiones meteorológicas no eran favorables, finalmente se ha podido desarrollar la Cabalgata con normalidad y lo que ha destacado, además de sus Majestades de Oriente, ha sido la animación que les acompañada, marcada por la música, el colorido y la magia de este día de Reyes.