Cargando...«Fútbol y política no pueden ser nunca la pareja perfecta», según el Atlético Tomelloso. Así quedó demostrado en la noche de ayer jueves cuando una reunión en un salón de plenos abarrotado «entre la Junta Gestora del Atlético Tomelloso y el PSOE» de la localidad «terminó en una especie juicio lleno de interrogantes, demasiadas disputas, continuos reproches y, lamentablemente, pocas soluciones». Tras «más de dos horas de reunión, los socios y aficionados del Atlético Tomelloso que quisieron seguir con detenimiento dicha reunión salieron igual que entraron; llenos de dudas y sin apenas soluciones. De hecho, la mayoría de ellos se fueron sin poder escuchar al presidente de la Junta Gestora, Jesús Carrascosa».
«Hubo cuatro protagonistas y varios temas en común; la alcaldesa Inmaculada Jiménez, el concejal de deportes Iván Rodrigo, el expresidente de la entidad auriverde, Cristóbal Moraga y Jesús Carrascosa, ex secretario y presidente actual de la Gestora constituida tras el cese de Moraga. Los temas no fueron otros que la polémica de la concesión del bar de la Ciudad Deportiva, la ordenanza fiscal de la tasa de la discordia y el cambio de césped del Paco Gálvez».
«El caso es que se pudo comprobar que la política apoya al deporte con la asistencia de todos los grupos políticos. Bien es cierto, tal y como indicaba la alcaldesa Inmaculada Jiménez, que ésta es una reunión extraordinaria, transparente y necesaria, pero también es una reunión desagradable”. Además, “esta reunión es insólita en este ayuntamiento porque no hay reuniones con el voleibol o el baloncesto ya que no hay problemas con otros clubes”.
Sin embargo, «aparte de no comenzar dicho encuentro con una puntualidad británica, tras una hora y 50 minutos le llegó la palabra a la parte más afectada e interesada de dicha reunión que no era otro que Jesús Carrascosa como presidente de la Junta Gestora. Detalles que resumen de alguna manera en lo que se convirtió la reunión».
Antes, al comienzo, tomó la palabra el edil Iván Rodrigo para poner en antecedentes a todos los allí presentes haciendo un histórico de la situación del fútbol en Tomelloso en los últimos años «y sacar a relucir temas como la sede del club, al “rescate” al Atlético Tomelloso en el año 2016 con la convocatoria de una subvención extraordinaria ante la falta de presentación a la misma en vía ordinaria (la cuál, matizó Moraga, se presentaron muchos más clubes aparte del Atlético Tomelloso), las inversiones en las instalaciones, el césped del Paco Gálvez, la concesión del bar y la famosa ordenanza de la tasa por publicidad». En resumen, «un mitin político, sumar tiempo y darle la vuelta a la tortilla sin mostrar soluciones fehacientes encima de la mesa. Eso sí, el concejal de deportes aseguró que esta reunión es fundamental para transmitir el compromiso con el club y con el fútbol de Tomelloso”.
«Hablando de reproches, de canastas y pabellones, de rescates, de los pliegos de condiciones y de otras muchas cosas, una de las cosas importantes que dijo Rodrigo fue que el problema no es que queramos que Cristóbal Moraga puje por explotar el bar de una Ciudad Deportiva, sino que no sabemos si se puede y por eso lo hemos consultado. Entonces, aquí saltó el ex presidente de la entidad para discrepar que “está parado por motivos políticos”.
Además, el concejal, «hablando de la ordenanza de la discordia», señaló que “una de las soluciones que podemos encontrar es dar algo más de 12.000 euros como segundo rescate” y se defendía de que “este ayuntamiento no ha hecho ningún agujero al club”. Por último, Iván Rodrigo aseguró que “hay disposición de acometer un rescate porque si el problema para la viabilidad del club es la ordenanza, aumentaremos el convenio para que el club no sufra ninguna consecuencia”. Además, «garantizaba que se iba a revisar la tasa de la discordia y proponía aplicar precios simbólicos».
Para la alcaldesa, esa reunión era “muy desagradable” pero también “muy necesaria” y se encargaba de recordar una y otra vez “la transparencia de este ayuntamiento”. Además, señalaba «con sinceridad que hay un problema político con el club y no somos capaces de decirlo abiertamente”.
Del mismo modo, «tiraba del mismo guión que el concejal de deportes para reprochar y recordar todas las batallas del pasado entre el ayuntamiento y el Atlético Tomelloso en estos dos años y medio de mandato. Habló de las inversiones, de los pabellones, de la sede, de la ordenanza y de otras muchas cosas».
«Por ejemplo, hablando del césped, la alcaldesa reconoció que el campo está igual que hace 70 años porque no ha habido inversión”. Por eso, “no nos escondemos y estamos aquí para dar la cara”. Además, «criticó la doble condición de Cristóbal Moraga como concejal y presidente de la entidad auriverde, ya que un concejal debe ser garante de ley y tener ética y moralidad, y aquí estamos obligados a hacer cumplir la ordenanza porque los políticos somos garantes de la legalidad”.
Insistía, además, sobre el tema de las tasas, que “me voy a ir con la cabeza bien alta el día que me vaya ya que las ordenanzas no se reinterpretan. Quizá la ley no nos gusta, pero la ordenanza es igual para todos”. «Una de las cosas que más le ha dolido a la primera edil es que se diga que el equipo de gobierno se va a cargar el fútbol”, ya que “este equipo de gobierno va a dar solución al problema y vamos a reformar la ordenanza”.
Antes de tomar la palabra el presidente de la Junta Gestora, tomó la palabra el expresidente del Atlético Tomelloso para «defenderse de algunas acusaciones de la alcaldesa», ya que “me molesta porque atenta contra la verdad que omitáis cosas importantes en vuestro relato, cosas que precisamente desembocan en nuestra desesperación actual”, porque “la adjudicación del bar de la Ciudad Deportiva lleva parada más de seis meses por motivos estrictamente políticos ya que todos los informes son favorables”.
«Se indignaba Cristóbal Moraga, recordando algunos acontecimientos, que cuando se entregó la nueva sede al Atlético Tomelloso la notaria fue en julio de 2016 y la oficina la entregáis justo un año después. No considero justificado ese tiempo, y me hace pensar mal que se firme en la única semana de vacaciones que cojo al año; justo cuando no estoy yo”. Por eso, “no soy de salir en las fotos, recuerdo que fui presidente por accidente y no necesito esa publicidad, pero ese tipo de cosas sí me hace ver que es un problema político contra mí persona”.
Por último, el ex presidente «lanzó una pregunta que jamás tuvo respuesta y quedó en el tenso aire que se respiraba en el Salón de Plenos. Expliquen el criterio de pedir un segundo informe para la adjudicación del bar y, sin embargo, no lo pidan a la hora de valorar la aplicación de la tasa. ¿Se dan cuenta que siempre hacen lo más gravoso para el club?”
«Casi dos horas después, tomó la palabra el verdadero protagonista de la reunión como parte afectada e interesada del Atlético Tomelloso y que no era otro que Jesús Carrascosa que tuvo que aguantar el chaparrón para exponer en una carta abierta sus cosas ante el ayuntamiento respaldado por una gran número de socios y aficionados».
«Leyó su extensa carta aclarando diversos puntos pero, sobre todo, dejó claro que no vengo a buscar culpables ni a soltar reproches cuando el único perdedor es el deporte de Tomelloso”. Del mismo modo aseguraba que “el Atlético Tomelloso se va a hacer cargo de devolver a las empresas ese importe de la tasa” y subrayaba que “todos hemos reconocido que hay un problema y que la relación institucional no ha sido la mejor, pero, ahora, tan solo queremos buscar soluciones. Todo lo demás no nos importa”.
«Tras las intervenciones acertadas de un par de socios y directivos concluyó la reunión y será en los próximos días cuando se empiecen a recibir las primeras noticias, si así lo estiman tanto el ayuntamiento como los grupos políticos de cara a resolver este problema de viabilidad del proyecto del Atlético Tomelloso».
