Desde el primer momento que contactaron con los distintos partidos les dijeron –en palabras de Melchor- lo que cada grupo municipal consideraba al respecto. “IU nos dijo que nos iban a llegar unas propuestas que no han llegado; PP nos dijo que presentáramos nuestros presupuestos y luego ya verían las enmiendas que presentarían». Con Equo «es con la única formación con la que sí que estamos llevando a cabo reuniones de trabajo que están muy avanzadas, por lo que queda la toma de una decisión de esta semana”, ha explicado a los medios.
También ha comentado que por el propio funcionamiento, “si se resuelve, bien, y si no se resuelve, no merece la pena seguir trabajando más allá de marzo para que el presupuesto se pudiera aprobar en junio o julio, ya que en poco tiempo, habría que empezar a preparar los del año siguiente. Si no se puede aprobar en el mes de abril, seguiremos con el prorrogado”, ha dicho. Si todo va bien, intentarán que se hagan las comisiones preparatorias en el mes de abril.
LOS PRESUPUESTOS PARTICIPATIVOS SALEN DE RECURSOS PROPIOS
En cuanto a la partida destinada a presupuestos participativos, tal y como ha remarcado Melchor, “la hemos sacado de los recursos propios. Cualquier presupuesto lo podemos sacar o bien de la Junta, de la Diputación o de los recursos propios para que no estén sujetos a los plazos que marca quien te da el dinero, en el caso de la Junta o la Diputación, justificándolo antes de un mes. En este caso, lo hemos hecho con recursos propios”.
Habitualmente hay una partida que está en torno a los 400.000 euros de recursos propios para hacer obras “y de esos hemos extraído 85.000. Además, luego vamos a poner una parte para el tercer plan de pavimentación, para accesibilidad”, ha proseguido explicando la alcaldesa.
En este sentido, ha comentado que “este año, si llegase a haber presupuestos, ese dinero sí lo detallaremos para que la gente sepa en qué lo estamos gastando, que no sea un cajón de sastre. Si hacemos el proyecto en relación con la aprobación de los presupuestos, sería una trampa, porque dependería de si saldrían o no los presupuestos. Pero no. Y si lo hacemos vinculado a los fondos que vienen de fuera, nos estaríamos condicionando y limitando en el tiempo, porque esos fondos que vienen de fuera hay que justificarlos antes de que te los paguen con un determinado plazo que no siempre coincide con el año”, ha concluido.