En una ceremonia solemne y al inicio de la Santa Misa de la Nochebuena de la Natividad del Señor, el pasado 24 de diciembre, la Parroquia San Antonio Abad de El Toboso recibió la «Luz de la Paz de Belén» Traída desde la Diócesis de Ciudad Real, fronteriza a El Toboso, la esta Luz está ininterrumpidamente prendida en el Altar Mayor de la seo toboseña para cuantos quieran tomar parte de ella y situarla en sus hogares durante este período navideño.
La ceremonia comenzó en el atrio de la Portada Oeste de la Iglesia. Tras la recitación solemne del Pregón de la Navidad, un acólito llevó hasta manos del Párroco de la localidad, Rvdo. D. Juan Miguel Romeralo Santiago, el farolillo que atesoraba esta Luz de la Paz de Belén del que se tomó su luz para encender un gran cirio que entró procesionalmente hasta el Altar Mayor. Durante la Misa del Gallo los fieles hicieron renovación de sus promesas bautismales al ser ésta la Navidad en el Año de la Fe, y al término de la celebración todos los fieles tomaron la Luz para llevarla encendida a sus hogares.
En su homilía, Romeralo Santiago indicó que «esta Luz de la Paz de Belén no se puede quedar sólo en esta sencilla llama, en un simple simbolismo. Cada vez que transmitimos un poco de alegría, un rayo de esperanza, cada vez que mostramos caridad con nuestros hermanos, logramos que sea Navidad. Así, el canto navideño de los ángeles jamás cesará […] En esta Noche Santa de la nochebuena, todos ponemos nuestra atención en aquello que ocurrió en un sencillo portal hace ya más de dos mil años y que cambió para siempre el rumbo de la historia, el nacimiento de Jesús, el hijo de Dios. Desde entonces y hasta hoy, los hombres no hemos dejado de buscar en Jesús un modelo que nos ayudase a lograr la paz y la felicidad que todos queremos y necesitamos. Esto es lo que celebramos hoy. Desde los tiempos de Jesús hasta el presente, la humanidad ha tratado de buscar siempre la misma Paz. Una Paz que llevemos nosotros dentro y que podamos transmitirle a todos los que nos rodean: nuestro prójimo. Se trata de la Paz que en una noche como esta anunciaron y cantaron los ángeles a los pastores de Belén: Gloria a Dios en el cielo y en la tierra PAZ a los hombres de buena voluntad».
Esta misma ceremonia se hizo en los conventos de clausura donde también permanece durante toda la Navidad llameante esta Luz de la Paz de Belén.





































































