Periodista extremeña, Pepa Bueno cuenta con una amplia experiencia en espacios informativos. Tras su paso por RTVE decidió pasar a las ondas radiofónicas. En 2012 se hacía cargo, junto a Angels Barceló, del programa matinal ‘Hoy por Hoy’ de Cadena de Ser. Actualmente y desde el pasado año 2019, Pepa Bueno lleva las riendas del espacio vespertino Hora 25. Un programa líder en su franja horaria que en la tarde de este viernes 16 de abril aterriza en la sede del Consejo Regulador.
Pepa Bueno y sus compañeros Javier Ruiz y Jesús Gallego analizarán la actualidad más inmediata teniendo muy presente la promoción de los vinos de la DO La Mancha.
Pepa Bueno nos desvela en esta entrevista su opinión sobre política, periodismo, igualdad y vino, entre otras cuestiones.
Hora 25 llega a tierras manchegas y más concretamente a la sede del Consejo Regulador. Un programa que tras 49 años sigue siendo líder de audiencia en su franja horaria. ¿Cuál es el secreto del éxito de este programa?
La reflexión y el contar con los mejores analistas para generar debate en relación a los temas de actualidad más importantes del día. Es decir, el ser capaces de elegir con rigurosidad, después de una jornada con multitud de temas de actualidad, los asuntos que tienen una repercusión directa sobre la vida de las personas y sobre la calidad de la democracia y de la convivencia.
Estos criterios son los que hacen que un programa con Hora 25 tenga una larga permanencia.
En las últimas semanas se ha intensificado ese fuego cruzado entre políticos y periodistas. ¿Cómo valora que políticos ataquen a abiertamente a periodistas y a medios de comunicación?
Con espanto y horror. Está claro que a los periodistas se nos puede criticar porque tenemos un trabajo público y por lo tanto estamos expuestos a la crítica como cualquier otro profesional de otro sector. Lo que es un horror es el señalamiento permanente y la intimidación a la que estamos sometidos.
Llevamos muchos años asistiendo a ruedas de prensa sin preguntas. Algo insólito que convierte una rueda de prensa en un mitin. De esta manera, los políticos eluden someterse al principio de contradicción, poniendo en entredicho el derecho a la información.
Los periodistas no somos perfectos y nos equivocamos pero estamos en la obligación de señalar a quienes no cumplen con las reglas y cuando así lo hacemos hay un señalamiento y una intimidación a quienes lo denuncian.
Hablando de política y de políticos ¿Qué valoración hace de la situación actual y que nota le pondría a la clase política?
Dirigentes políticos responden a la sociedad en la que viven. Cada época tiene su sociedad y por tanto los dirigentes políticos responden, como cualquier otro ciudadano, a la sociedad en la que viven. Dicho esto, creo que vivimos momentos en los que se ha debilitado la democracia liberal tal y como la hemos entendido hasta ahora.
Resulta decepcionante del daño político al peor año de nuestra historia. 2020 ha sido el año del miedo, hemos vivido encerrados, con muertos, enfermos y con incertidumbre mientras que los políticos se han dedicado a hacer un ruido insoportable hablando de cuestiones como pactos que nunca llegan y que son una mentira. El mejor ejemplo es el que tiene que ver con el Consejo del Poder Judicial.
Nuestra vida pública es un instrumento que no camina a ninguna parte.
Valle-Inclán escribía que “política y periodismo son el mismo círculo en diferentes espacios.”. Después de años de experiencia, considera que la prensa en España ha perdido esa objetividad e imparcialidad en aras de intereses políticos y/o económicos.
En España y en estos momentos se está haciendo buen periodismo. Leo, veo y escucho noticias fantásticas pero también es cierto que hay muchas otras que no son tan buenas. La pluralidad mediática nos permite ser muy selectivos y eso es lo que hay que hacer. Evitar el amarillismo y el show y quedarse con aquellos que hacen una buena praxis de la profesión. No se puede convertir la actualidad informativa en un show. En cualquier caso, existen muy buenos profesionales que hacen una rigurosa y contrastada labor informativa.
Es evidente que las vacunas, el covid, elecciones y la política en general copan todos los espacios informativos generando cierto hastío entre la ciudadanía. ¿Cómo se puede revertir esta situación y qué papel juegan los medios de comunicación?
Los medios de comunicación son empresas que se dirigen a la sociedad en la que viven y por tanto no pueden ser los responsables de la crispación en la que vivimos, sobre todo cuando existe la pluralidad informativa. Somos intermediarios entre el poder político y la sociedad pero no los responsables de lo que ocurre. Sigo creyendo en el ejercicio responsable del periodismo y por tanto también estamos obligados a hacer autocrítica, a ser exigentes y a señalar las malas prácticas, pero insisto en que los periodistas no podemos arreglar la crispación en la que vivimos.
Hablamos de igualdad y de mujeres periodistas. ¿Ha sido fácil para usted alcanzar el éxito y la credibilidad que ha conseguido?
Fácil no hay nada en la vida. El éxito es pensar que se tiene credibilidad y por tanto sería un fracaso que quienes te escuchan, te leen o te ven no te crean. Fácil como digo no hay nada. El secreto es trabajo, trabajo y trabajo; ser coherente y honesta en lo que se hace y pedir perdón cuando te equivocas. Además, yo he tenido el privilegio de hacer y estar en grandes formatos que me han permitido crecer profesionalmente. Conozco a grandes profesionales que se han quedado en el camino por no estar en el formato adecuado y eso es un valor que hay que tener en cuenta.
¿Cómo valora que las empresas tengan la obligación de hacer público los salarios que perciben hombres y mujeres. Es este un paso más para avanzar en la igualdad?
Quien hace la ley hace la trampa, se dice, pero supongo que esta obligación es un paso más para acabar con situaciones de desigualdad en las empresas. Queda todavía mucho camino por recorrer y cuando llevas tantos años te das cuenta que cuantas más oportunidades hay para acabar con esa brecha descubres sutilmente como sigue habiendo un trato diferencial. Un ejemplo es que la autoridad de la opinión de la mujer sigue siendo la gran olvidada. Siempre se cita a hombres como fuentes fiables y rigurosas y nunca la de una mujer.
Este viernes 16 de abril programa especial de Hora 25 desde la sede del Consejo Regulador. ¿Qué nota le pone a los vinos de la DO La Mancha y cómo valora el trabajo de promoción que se hace desde su Consejo Regulador?
Tengo que decir que se hacen unos vinazos y eso hay que ponerlo en valor. Se ha mejorado mucho en la promoción y la comercialización de los vinos y eso es muy bueno porque el vino reporta economía, empleo y marca de país.
Hace unos años, cuando se podía viajar, me daba mucha rabia encontrar vinos italianos, franceses, argentinos y no ver en la carta de los restaurantes vinos españoles. Afortunadamente, esta situación ha cambiado y hoy podemos encontrar los grandes vinos que producimos en España y especialmente en la DO La Mancha en cualquier lugar del mundo. Insisto en la importancia de poner en valor el gran trabajo que se está haciendo en esta materia.








































































