En una rueda de prensa en Alcázar de San Juan, representantes del Partido Popular de Castilla-La Mancha, encabezados por la diputada regional María Gil y por el portavoz municipal del PP, José Antonio Navarro, cargan contra la gestión sanitaria del Gobierno autonómico poniendo como ejemplo las listas de espera en el Hospital Mancha Centro y las decisiones del Ejecutivo central sobre la financiación de las comunidades autónomas.
Gil, responsable de Educación del PP en las Cortes regionales, denuncia el colapso del sistema sanitario y alerta de que las listas de espera ya alcanzan a casi 100.000 pacientes en la comunidad. “Hay personas que llevan más de 120 días esperando una cita en traumatología”, afirma, citando el caso del Hospital Mancha Centro, que acumula más de 7.000 personas pendientes de intervención quirúrgica, pruebas diagnósticas o consultas externas.
“Hay personas que esperan más de tres o incluso cuatro meses para una simple resonancia o para una consulta de rehabilitación. Otras llevan medio año esperando una operación que no llega”, lamenta Gil, quien también acusa al Ejecutivo autonómico de “dar la espalda” tanto a los usuarios como al personal sanitario.
Según Gil, el Gobierno de Emiliano García-Page presume de tener la mejor atención primaria, pero los ciudadanos tienen que esperar hasta 20 días para ser atendidos en sus centros de salud. La diputada acusa al Ejecutivo regional de falta de planificación, infraestructuras deterioradas y de sobrecargar a los profesionales sanitarios con tareas administrativas.
Por su parte, el portavoz municipal del PP exige al Ayuntamiento que actúe de forma urgente para reparar los accesos al centro de barrio de Goya. También solicita explicaciones claras sobre el estado del proyecto de la nueva depuradora que debe dar servicio a Alcázar de San Juan y Campo de Criptana.
En otro frente, el Partido Popular rechaza frontalmente la propuesta del Gobierno de Pedro Sánchez de condonar deuda a ciertas comunidades autónomas, calificándola como un “pago político” a los independentistas. “Es una medida injusta que rompe el principio de igualdad territorial”, asegura Gil, quien advierte que “los castellano-manchegos vamos a pagar la factura del independentismo catalán”.
El PP apuesta por una reforma del sistema de financiación autonómica que garantice igualdad, multilateralidad, solidaridad y suficiencia financiera. Además, reclama al Gobierno regional la recuperación inmediata de la carrera profesional sanitaria y un verdadero plan de modernización del sistema.