“Es una decisión en la que estamos trabajando sobre criterios estrictamente técnicos y que no debe sorprender ni asustar a nadie” ha puntualizado, puesto que “las muestras ya están viajando de forma habitual de un punto a otro de Castilla-La Mancha. No todos nuestros laboratorios actuales analizan todas las sustancias ni llevan a cabo todas las técnicas”, ha explicado.
A propósito de la interpretación que de esta futura decisión se ha hecho ya en algunos ámbitos, Seguí ha lamentado “que se hayan llegado a decir barbaridades como que este planteamiento pueda poner en riesgo la Salud Pública en nuestra región; es incomprensible que alguien pueda llegar a ese grado de temeridad para realizar tales manifestaciones, que no tienen ningún fundamento”.
“Unificar los análisis no es despilfarrar recursos, sino todo lo contrario, pues aprovecharemos todo el equipamiento que ya existe y todo el personal técnico. Con ello mejorará el coste unitario y, sobre todo, generaremos más capacidad de análisis y reduciremos gastos para otras direcciones generales. Es un cuestión de mejora de la eficiencia que casi no debería requerir explicación”, ha asegurado Seguí.
La directora general ha explicado, además, que “las nuevas demandas de la Unión Europea exigen una acreditación técnica individualizada, renovable cada cuatro años, que hace inviable el actual modelo en condiciones normales, y más aún en las circunstancias que vive esta Comunidad Autónoma, por culpa de la gestión económica anterior. Esa herencia no nos impide mejorar la gestión, que es lo que estamos haciendo”, ha concluido.