Ha explicado, no obstante, Sánchez Bódalo que tienen constancia de que está trabajando más gente con cargo al Plan de Empleo de la Diputación en otros pueblos como consecuencia de que se aceptarán contratos formalizados a partir del 1 de enero de 2012, y que permanecen a la espera de los que ayuntamientos hagan los trámites.
Y ha añadido que les consta que el Plan de Empleo de la Diputación «es el único que está funcionando en la región y, lamentablemente, por la información que llega, no habrá ninguno más este año a pesar de que es vital para las personas que han perdido todos los ingresos en la unidad familiar».
Ha comentado, asimismo, que está más que probado que el Plan de Empleo contribuye a contener la presión social en los municipios, pero considera que a final de año «la situación será grave» si el Gobierno de Castilla-La Mancha no complementa esta acción con iniciativas propias. Ha afirmado, a este respecto, «que puede convertirse en una situación dramática para muchas familias y alcaldes», por lo que espera que esta reflexión se quede sólo «en una mala premonición».
Ha hecho Sánchez Bódalo una valoración en relación al papel que juega la Diputación en materia de promoción económica en los sectores productivos más representativos de la provincia y de la región. Y se ha referido a la organización de las ferias España Original y FENAVIN diciendo que la idea surgió porque la provincia de Ciudad Real tiene su base en agricultura y ganadería, «pero el salto cualitativo lo da con la participación de la industria agroalimentaria, muy representativa en la economía de la provincia y de la región». Partiendo de este dato, la Diputación hace unos años decidió aliarse con ese sector estratégico porque incide desde en el agricultor hasta el elaborador, como también ha ocurrido a un gran nivel con el del vino a través de FENAVIN. Sánchez Bódalo ha recordado que España Original vio la luz aprovechando la sinergia que creó la Feria Nacional del Vino, gracias a la que se mantienen contactos permanentes en más de treinta países para la distribución alimentaria.
La idea principal es apoyar a los productores, elaboradores y pequeñas y medianas empresas con el objetivo de que puedan dar el salto al comercio exterior sin necesidad de hacer una inversión excesiva. «Lo que hacemos es darle la vuelta a la tortilla, que es traer a compradores de 45 países, de manera que el productor pueda tener a su alcance la distribución comercial y los compradores. Ese es el éxito de FENAVIN y de España Original», según Sánchez Bódalo.
Se trata, pues, de realizar dos acciones directas que inciden muy positivamente en la economía provincial y regional, tanto que nadie ha emitido nunca una crítica o queja al respecto en los últimos doce años. Siempre se han aprobado, a juicio de Sánchez Bódalo, por unanimidad y en coordinación con multitud de organizaciones que centran su actividad en apoyar a los sectores productivos y el desarrollo empresarial, y también con la colaboración del IPEX y del Gobierno de la región. Ha hecho referencia, además, a las acciones indirectas que sufraga la Diputación a través de la firma de más de 40 convenios de colaboración al año para potenciar la promoción económica en la provincia a través de las Denominaciones de Origen, las IGP, las agrupaciones de empresarios locales y los ayuntamientos.
«En un momento como este, con la que está cayendo, la Diputación tiene o no tiene que hacer eso, ese es el debate», ha dicho Sánchez-Bódalo antes de preguntarse que si no debe hacerlo, está claro que alguien lo tiene que hacer dado el consenso unánime que siempre se ha producido en torno a FENAVIN y España Original y a los buenos resultados de negocio que se vienen produciendo edición tras edición.
Y ha querido dejar muy claro que a la Diputación no se le puede reprochar que no haga lo que debe hacer, «que es apoyar a los municipios y a las personas que tienen más dificultades en este momento». Ha afirmado que se predica con el ejemplo, puesto que en dos meses casi 2.000 personas trabajan en 80 pueblos de la provincia con una inversión de 5’5 de euros y se han contemplado 1’5 millones de euros a atender a ciudadanos y ciudadanas que se encuentran en situación de emergencia social.
«Eso no lo ha hecho nadie en Castilla-La Mancha, y además no le debe nada a nadie, ni a los ayuntamientos, por supuesto. Nuestra vocación municipalista está a prueba de bomba», ha sentenciado Sánchez-Bódalo quien ha asegurado que en la Diputación de Ciudad Real se sienten «muy orgullosos y muy contentos» de serles útiles a la gente, de proporcionarles trabajo en momentos muy difíciles, de que puedan ampliar sus negocios y lleguen a nuevos mercados y de que consoliden sus puestos de trabajo.