
El concejal de Obras, Rafael Marcelino, ha visitado este viernes los siete pasos accesibles que se han habilitado en la calle Dehesa y en el entorno de la Fuente Juanillo durante los últimos meses de 2017. Marcelino ha explicado que se decidió priorizar esta zona ante las peticiones de vecinos y la cercanía del colegio Infante Don Felipe. En total, el Ayuntamiento de Daimiel, con cargo a uno de los proyectos del Plan de Empleo Extraordinario de la Junta de Comunidades, ha ejecutado más de veinte vados para peatones en todo el municipio.
Marcelino informaba que gracias a esta subvención la concejalía pudo contratar a 12 personas durante 6 meses y que el presupuesto para la eliminación de barreras arquitectónicas y mejora de acerado se movió “entre 15.000 y 18.000 euros”. Del resto de intervenciones, el concejal de Obras citaba las mejoras en las inmediaciones del CEDT o el acondicionamiento del paso de cebra cercano a las dependencias de la Policía Local.
En esta visita, el aparejador municipal, Plácido Sánchez, comentaba que la accesibilidad de los pasos ha seguido los criterios de la nueva normativa que se implantó a nivel nacional “hace unos tres años”. Sánchez considera que estos criterios facilitan más el giro de las sillas de ruedas “al tener una pendiente constante”.
Por último, Rafael Marcelino comentaba que el Ayuntamiento seguirá actuando en más puntos durante los próximos meses. Una planificación donde se tiene en cuenta las peticiones vecinales, al igual que en el caso de los resaltos. Sobre este punto, el concejal advertía que estos requerimientos tienen que contar con el visto bueno de todos los vecinos porque “una vez que se coloquen los resaltos no se van a cambiar”.