Cargando...Elena García agradece que “se trabaje por la paz desde bien pequeñitos para que el mundo sea un lugar mejor”.
La comunidad educativa del Colegio de Educación Infantil y Primaria Carmen Arias de Socuéllamos (alumnos, profesores y padres) han celebrado esta mañana su XXVI Paseo por la Paz y la No Violencia que, como cada año, ha discurrido desde el centro educativo hasta la Plaza de la Constitución. Portando pancartas en favor de la paz, y ataviados todos con gorras y camisetas blancas, los escolares del Carmen Arias han recordado a toda la población que “un mundo en paz es un mundo mejor”.
A su llegada al ágora socuellamina, estos niños y niñas han sido recibidos por la alcaldesa, Elena García, y varios miembros de la corporación municipal como el edil de educación, Rafael Risueño. Allí, han desarrollado un pequeño acto conmemorativo en el que el primero en tomar la palabra ha sido el director del centro, Ramón Arteaga, quien ha recordado que “éste es un acto simbólico que se realiza cada año el último día de curso, para no perder de vista que el trabajo por la paz tiene que empezar desde las cosas más pequeñas de cada día”.
Acto seguido ha tomado la palabra el concejal de educación, Rafael Risueño, quien además de desear unas felices vacaciones a los escolares y leer un poema de Miguel Hérnandez, ha afirmado que “la paz es un trabajo de todos en conjunto” y ha recordado a los profesores que “para educar no basta con conceptos y conocimientos, sino que también es necesaria una educación en valores como la tolerancia, la cooperación y la concordia”.
Tras la lectura de unos poemas de Gloria Fuertes por parte de algunos representantes del alumnado, la alcaldesa, Elena García, ha celebrado que “esta actividad lleve 26 años celebrándose por el gran valor que tiene” y ha invitado a los pequeños a “trabajar por la paz todos los días del año”, agradeciendo que esto se haga “desde bien pequeñitos para conseguir que el mundo sea un lugar mejor”.
Este acto tradicional del colegio Carmen Arias ha concluido con la interpretación de una haka, una danza tradicional de la cultura maorí, para representar la fuerza y la unidad en la búsqueda de la paz.
