Triguero considera que el visto bueno de la organización juvenil del PP al tijeretazo de Cospedal supone dar la espalda a los ciudadanos, por lo que les ha emplazado a que si quieren ser una formación autónoma e independiente “creemos que es hora de que le paren los pies a Cospedal”.
Para ello, el joven socialista ha pedido un gesto de valentía a los dirigentes de Nuevas Generaciones y se manifiesten totalmente en contra de este tipo de decisiones que está llevando a cabo De Cospedal, porque lo contrario sería defraudar a los castellano-manchegos “con tal de ser los títeres de la señora De Cospedal”.
Las Juventudes Socialistas consideran que no hay excusa alguna para mostrar este rechazo a unas medidas “salvajes” y “agresivas” contra los ciudadanos, puesto que se trata de “un recortazo” que afecta de lleno a la Sanidad, un área de la que, ha dicho Triguero, “nos sentíamos muy orgullosos porque era de las mejores del mundo y ahora vemos cómo todo se va al traste pese a que Cospedal decía que era demagogia y lo negara una y otra vez antes de las elecciones”.
Además, Triguero ha señalado que estos recortes afectarán también de manera “brutal” a la Educación, donde se han despedido ya a cerca de mil interinos y se elimina la gratuidad de los libros de texto, y a los servicios sociales públicos, aspectos que para el dirigente de Juventudes Socialistas no cabe duda de que traerán más paro y más pobreza a la región.
Ante esta decisión “imperdonable e inolvidable”, Triguero cree que Cospedal deberá responder ante los ciudadanos, y “deberá ser más que convincente para explicar como en cinco meses ha sido capaz de producir tal deterioro en unos servicios sociales ejemplares para dejarnos en un nivel de los años 60 cuando predominaba la beneficencia”.
Por último, David Triguero ha manifestado que tanto Cospedal como el resto de miembros del PP y de Nuevas Generaciones “deberían pedir perdón por atacar de este modo a los castellano-manchegos y por estafarles al ocultar el tijeretazo antes de que acudieran a las urnas, una decisión que no puede recibir otro nombre que el de cobardía política”.