Las vacunas cobran por lo tanto más importancia si cabe este año que en años anteriores ya que constituyen una herramienta fundamental para la lucha contra los virus respiratorios.
¿Por qué vacunarnos de la gripe?
Existen muchos motivos para vacunarse cada año: la vacunación puede evitar que se contraiga la enfermedad, previene cada año millones de casos graves en el mundo y además la vacuna evita decenas de miles de hospitalizaciones.
Este año además la coincidencia del virus, la gripe, la COVID-19, y otros virus respiratorios aumenta la probabilidad de coinfecciones y complicaciones especialmente en los grupos de riesgo, por lo que resulta más necesario vacunarse frente la gripe.
¿Por qué ponerse la dosis de recuerdo del COVID?
Según la evidencia científica, con el paso del tiempo se produce una disminución de la inmunidad que deja la vacuna o la infección, especialmente en las personas mayores e inmunodeprimidas. Además, surgen nuevas variantes o nuevos linajes de las variantes conocidas, lo que sumado al hecho de que La mayoría de las personas de la población diana recibieron la última dosis de vacuna de COVID-19 hace más de 9 meses hace que sea crucial que las personas con mayor riesgo reciban una dosis de recuerdo para reforzar la inmunidad.
¿Qué vacunas se están administrando?
En el caso de la gripe se están administrando vacunas tetravalentes, es decir, vacunas que contienen 2 cepas A y 2 cepas B. Además, en el caso de los mayores, se están administrando vacunas especialmente diseñadas para ellos de forma que se evite el problema de la menor respuesta inmunitaria debida a la edad.
En cuanto al COVID, se están administrando las nuevas vacunas bivalentes que se diferencian de las anteriores en que incluyen antígenos de dos cepas del virus SARS-CoV-2, la cepa original y la Ómicron. Administradas como dosis de recuerdo potencian y amplían la respuesta inmune y, por lo tanto, la protección frente a la enfermedad, sobre todo frente a enfermedad grave.
¿Cuándo poner la dosis de recuerdo del COVID?
Se recomienda la administración de la dosis de recuerdo de otoño independientemente del número de infecciones previas y aunque esté correctamente vacunado, al menos 5 meses después de haber recibido la anterior o de haber pasado la enfermedad.
En personas mayores de 80 años, residentes en centros de mayores y personas con alto grado de inmunosupresión se recomienda la administración de la dosis de recuerdo a partir de los 3 meses tras la última dosis o la infección.
La administración conjunta de las vacunas frente a la gripe y al COVID es segura. No existe contraindicación, ya que no aumenta los efectos adversos individuales ni los potencia.
¿Quién no se debería vacunar?
La vacuna de la gripe no se debe administrar a niños menores de 6 meses, a personas con antecedentes de reacción anafiláctica a dosis previas o a algún componente de la vacuna. En el caso de enfermedad febril severa concurrente, se debería vacunar después de la remisión de los síntomas.
Por otra parte, existen muchas falsas contraindicaciones a la hora de recibir la vacuna:
- Las enfermedades menores no contraindican el uso de la vacuna de la gripe, particularmente en niños con infección leve del tracto respiratorio superior o rinitis alérgica, por lo que en estos casos la vacunación no se debería posponer.
- El embarazo y la lactancia no son contraindicaciones para recibir las vacunas de la gripe o del COVID, todo lo contrario, están indicadas ya que no solo protegen a la madre, sino que pueden proteger al niño.
Recordemos que la coinfección de gripe y COVID-19 presenta mayor riesgo de muerte que ambas infecciones por separado, las vacunas pueden evitarlo.
Sagrario Pérez de Agreda Galiano
Centro de Información del Medicamento
Colegio Oficial de Farmacéuticos de Ciudad Real