


El Ayuntamiento de Puerto Lápice apostó la pasada semana por llevar hasta FITUR un stand propio, para dar conocer todos los recursos turísticos de los que dispone el municipio.
Puerto Lápice, entre sus grandes atractivos, cuenta con los Molinos de viento (“Farol de la Mancha, el Hidalgo y Sansón”). Precisamente es en este último, situado en el centro, el que en estos momentos está rehabilitando el Consistorio y procederá a dotarlo de su maquinaria con una copia exacta de la original. Todo se realizará artesanalmente y con materiales nobles, de manera que en pocos meses puedan estar realizando moliendas de cara al público y que la sociedad conozca de primera mano cómo se hacía ese proceso en otros tiempos, a la vez que recuperan uno de los tesoros más emblemáticos de la Mancha.
La recuperación de oficios y tradiciones populares “tiene una gran importancia para esta corporación municipal”, explican desde el Ayuntamiento, “porque a pesar de que Puerto Lápice tiende a ser un pueblo de la España vaciada, queremos seguir creciendo”. “Hemos tenido la gran suerte de que el presidente de Castilla Mancha, Emiliano García-Page y la Ministra de turismo, Reyes Maroto, plasmaran unas palabras en esa pieza de la rueda catalina y que formará parte del conjunto de 10 piezas que componen la misma, y que se podrá contemplar una vez montado todo el equipamiento y maquinaria”, explica el Consistorio.
La gastronomía con todas sus facetas es otro fuerte, al igual que el hospedaje tanto en hoteles o alojamientos rurales: “Contamos para ello de unos servicios inmejorables; aunque también hacemos frente al turismo con el área de autocaravanas, una de ellas que lleva más de 7 años funcionando a pleno rendimiento y estamos próximos a inaugurar otra con capacidad para 18 plazas, dotada con los mejores servicios que actualmente se puedan demandar”.
Las rutas por los senderos “son un hecho y continuamente tenemos gente disfrutando de ellas, las cuales tienen un gran potencial de naturaleza en estado puro, de flora, fauna y lugares muy pintorescos”, explican desde el consistorio.
“Nuestra calles, las ventas, nuestro puente romano, la plaza porticada, centro de reunión y corazón del pueblo donde convergen los bares y dónde poder pasar veladas de ocio y relajarnos viendo cualquier tipo de actuación cultural los fines de semana de los meses de estío son otro de los atrayentes”, explican sobre el potencial turístico porteño.
Por todo esto “y la hospitalidad que nos caracteriza a los vecinos, el visitante que desee venir tiene la posibilidad de pisar el mismo suelo que pisó Cervantes”. “Somos un pueblo antiguo y a la vez moderno que queremos, podemos y nos estamos adaptando al turismo. Debemos estar orgullosos de nuestra tierra y mostrárselo a todo el mundo de la mejor manera que sabemos y FITUR ha sido ese escaparate”, ponen en valor.