El Ayuntamiento de Daimiel, con su alcalde, Leopoldo Sierra, a la cabeza, mantiene un operativo de seguimiento constante ante las crecidas del río Azuer que se vienen produciendo en las últimas 48 horas derivadas fundamentalmente de los aportes del arroyo del Alhambra y Pantano de Vallehermoso. El objetivo se dirige especialmente a salvaguardar la zona industrial próxima al margen del río y, sobretodo, el perímetro de acceso a la población y zonas residenciales.
Las medidas adoptadas hasta la fecha están siendo “acertadas para mantener, dentro de nuestras posibilidades, la situación bajo control”. Recordó que hasta las dos de la madrugada del miércoles se vino actuando en elevar los diques de protección en ambas áreas, una cuestión, dijo, que junto con el aliviadero realizado en la carretera, a los pies del puente azul, “da tranquilidad y seguridad a los vecinos”. La incertidumbre llega de la mano de la meteorología con una lluvia que, indicó, “no está siendo nuestra aliada en estos momentos”. De hecho, hasta las diez de la noche, se habían consignado 11 litros en menos de siete horas.
El alcalde daimieleño informó que los niveles que vierten del Pantano de Vallehermoso se han visto reducidos pasando de los 50-55 metros cúbicos por segundo a los aproximadamente 22 que llegaban a última hora de la tarde del miércoles. Esto ha generado que el nivel del río a su paso por la prolongación del Paseo del Carmen baje casi 40 centímetros proporcionando un “colchón” de “confianza” ante una posible subida en las próximas horas.