


Coincidiendo con el inicio del tiempo cuaresmal, la Cofradía del Santo Entierro y Nuestra Señora de la Piedad de Campo de Criptana ha presentado, en un pequeño acto celebrado en la ermita de la Madre de Dios, la imagen de Cristo Yacente tras los trabajos de restauración acometidos sobre el titular de la hermandad.
Cuatro meses de intenso trabajo por parte del escultor e imaginero, Francisco Javier Muñoz Boluda, que han tenido como resultado la restauración de Cristo Yacente. Una talla que, tras 83 años, presentaba un deterioro notable por lo que “era necesario y urgente acometer este proyecto para conservar una de las joyas patrimoniales y de mayor valor artístico de la Semana Santa de Campo de Criptana”, tal y como explicaba el presidente de la Cofradía Ángel Francisco Ramos, quien aseguraba que “pese a las dudas y temores iniciales el resultado ha sido increíble”.
Un cuidadoso trabajo de restauración donde la clave ha sido “la conservación”, tal y como ha destacado Francisco Javier Muñoz Boluda, quien, en su intervención, manifestaba haber dejado a un lado “mi vertiente creativa para centrarme en la técnica y acometer un trabajo perfecto a través de la consolidación estructural de la escultura, la limpieza y reconstrucción del estrato pictórico y la aplicación de un tratamiento preventivo antixilófagos”.
Una restauración en la imagen de Cristo Yacente que desde este miércoles, 22 de febrero, podrá ser contemplada por quienes visiten el altar que la Cofradía del Santo Entierro y Nuestra Señora de la Piedad ha dispuesto con motivo de la Cuaresma.
Destacar, asimismo, que tras el acto de presentación a miembros de la junta directiva y ex presidentes, el párroco y consiliario, Juan Carlos Camacho, procederá a bendecir la imagen en el Vía Crucis que él mismo realizará el martes 7 de marzo en la Madre de Dios.