En concreto, las obras han sido prestadas por Sagrario y Enrique, hermanos de los artistas, y Concha, prima de todos ellos. En presencia de Sagrario Úbeda, la presidenta del Instituto Municipal de Cultural, María Jesús Pelayo, les agradeció su generosidad y la facilidad que han dado al Ayuntamiento para reunir todas estas obras en una exposición con la que se pretende poner en valor la obra de ambos hermanos, más desconocida en el caso de Gustavo Úbeda, que pasó gran parte de su vida en Sudamérica, donde sí adquirió fama y reconocimiento.
El caso de Agustín es diferente, dado que tiene obras repartidas por importantes museos de diversos países. En Madrid su presencia es muy importante en el Museo de Arte Contemporáneo, aunque sus trabajos se encuentran en lugares tan dispares como Ginebra o California.
Del total de 65 obras expuestas, la mayoría pertenecen a Agustín Úbeda, mientras que de Gustavo se podrán ver 14 óleos y siete piezas cerámicas. De Agustín habrá obras de toda su trayectoria, incluso algunas pertenecientes a sus primeros momentos, realizadas antes incluso de su ingreso en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, donde obtuvo su primera titulación. Hay que señalar además que Agustín Úbeda nació en Herencia, aunque su vinculación con Alcázar de San Juan era muy estrecha hasta el punto de organizar su primera exposición en esta localidad en 1949.
María Jesús Pelayo animó a todos los vecinos y visitantes a visitar esta muestra, de la que destacó su carácter irrepetible porque será muy difícil volver a reunir tal cantidad de obras privadas en un mismo espacio.
Por su parte, Sagrario Úbeda señaló que había sido “un placer” ceder todas estas obras al Ayuntamiento, al que agradeció “que se acuerde” de sus hermanos, lo que consideró “un gran honor”.
De Agustín recordó que “desde que nació era pintor” por influencia de su padre, que también pintaba. “Se trasladó a Madrid y allí en seguida lo destacaron como un gran pintor, pero para mí siempre fue mi hermano, un hombre entrañable, un caballero”. En el caso de Gustavo, su hermana comentó que tenía un estilo completamente distinto. Con 25 años se fue a Sudamérica y cuando con el paso de los años regresó a España se sintió “desubicado” y se volvió a marchar. Sagrario Úbeda lo definió como “muy generoso” y destacó que era pintor, ceramista, escritor y poeta.
EXPOSICIÓN DOS PINTORES: AGUSTÍN ÚBEDA Y GUSTAVO ÚBEDA
Desde el día 17 de febrero y hasta el 8 de abril, el Museo Municipal de Alcázar de San Juan presenta una singular exposición, totalmente novedosa en el panorama expositivo español. Se reúne por primera vez y de manera muy singular la obra pictórica del extinto catedrático de Bellas Artes de la UCM Agustín Úbeda con la obra pictórica y cerámica de su hermano, el artista, Gustavo Úbeda, prácticamente desconocido en España.
Los hermanos Úbeda junto a otro de ellos prácticamente dedicado a la fotografía Ángel Úbeda, estuvieron en París en los años cincuenta, formado parte de la última oleada de artistas españoles que formaron parte de la Escuela de París. Mientras que Agustín hizo buena parte de su trayectoria en Francia, donde residió y pintó por cerca de veinte años para volver a España a terminar su carera artística. Gustavo tras un breve periodo en París, decidió vivir en Brasil prácticamente toda su vida, desarrollando allí su carrera artística y literaria.
Esta es la primera vez que ambos artistas manchegos nacidos en Herencia, en 1925 Agustín y en 1930 Gustavo, muestran juntos su obra en estas tierras. Es la primera vez que se presenta una colección de pinturas de Gustavo en España. La colección de Agustín Úbeda de carácter totalmente intimista está formada por piezas de las colecciones particulares de dos de sus hermanos Sagrario y Enrique, se completa con las piezas de la colección familiar de su prima Concha y en general encontraremos en la visita toda la trayectoria emblemática de las diversas etapas en la obra del pintor. De manera especial podremos contemplar algunas obras muy de juventud de su tiempo de estudiante en la madrileña Escuela de Bellas Artes de San Fernando e incluso anteriores. pinturas totalmente desconocidas por el público en las que ya se aprecia ese estilo especial y comprometido que tiene Úbeda en toda su trayectoria, desde las alegrías parisinas, a la nobleza y el rigor de sus últimas producciones madrileñas, donde el color negro les aporta el sentido mas clásico que se pudiera encontrar.
Dibujos, pasteles, tintas, óleos y todo tipo de trabajos se recogen entre sus bodegones, cabezas, paisajes, escenas, figuras femeninas, retratos y todo la iconografía de Agustín salpicada de símbolos, números o flechas que marcan direcciones imposibles. Un lujo y una ocasión única para los seguidores y los aficionados.
Junto a él se presenta la obra de su hermano Gustavo Úbeda, un artista de su época que se dedicó a la pintura, a la literatura y a la cerámica en las lejanas tierras del Brasil de Bahía, realizando exposiciones por toda Sudamérica. Una colección de catorce lienzos y siete piezas cerámicas que dan una primera idea de la producción del autor. Su obra que podemos adscribirla al último surrealismo español, recoge elementos emblemáticos de su universo personal, resultado de fina ejecución, alegre, colorista y muy decorativa. Entre las piezas cerámicas decoradas que se presentan; cuencos, platos y tazones, se detecta una yuxtaposición de las tradiciones europeas de trabajo sobre la cerámica muy habituales en grandes nombres españoles de todo el siglo XX, con tradiciones americanas y africanas acrisoladas en aquellas tierras. Vivió en Salvador de Bahía una de las ciudades de mayor mestizaje cultural y racial que despertó el interés de escritores y artistas de todo el mundo en la segunda mitad del siglo XX.
La oportunidad de conocer a estos artistas y vivirlos juntos en su obra es de gran interés.