“Ser el secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha es un honor tremendo”. Así se ha expresado Emiliano García-Page tras haber sido nombrado como tal con el 95,88 por ciento de los votos de los delegados en el 10ª Congreso Regional que hoy se está celebrando en Toledo.
García-Page ha asegurado que “me siendo muy bien y con muchísimas ganas. Con mucho esfuerzo, porque nada es fácil, vamos a conseguir remontar esta pendiente”. En este punto ha mostrado su total seguridad al afirmar que “tengo muy claros mis principios”, añadiendo que “me comprometo a que Castilla-La Mancha recupere su autoestima y para ello tendrá que tener un Gobierno de esta tierra, que antes de nada crea en Castilla-La Mancha. Nadie discute que nosotros creemos en ella porque, entre otras cosas, estamos desde su nacimiento”.
En su intervención ha destacado que “nos debemos a la región. Mi partido es el PSOE, pero cada vez que tenga que tomar partido lo va a tomar por Castilla-La Mancha, no vamos a hacer como Cospedal. Y cada vez que tengamos que tomar partido lo haremos por la gente que más lo necesita, que en nuestra tierra es mucha”.
En su opinión, “hoy le hemos dado un disgusto tremendo al PP. Esperaban que nos rompiéramos, lo han intentado y lo van a intentar. Sé que me convertiré a partir de hoy en una diana y estoy seguro de que va a haber mucho ataque”.
En cualquier caso, ha subrayado, “lo que más me importa es que hoy en Castilla-La Mancha hay miles y miles de personas que no lo están pasando bien, hay muchísima gente que está sufriendo las consecuencias del paro, otros empiezan a sufrir las consecuencias de que les manden lejos para hacerse una mamografía o una radiografía, otros que no esperan ni mucho menos confían en tener una beca para el sistema educativo”. Por ello, ha subrayado, “lo que nos tiene que importar es la gente que nos ha estado apoyando durante mucho tiempo, eso solo es porque se hacen las cosas bien, y esperan que nosotros acertemos para volver a darnos su confianza”.